#TurismoSustentable
Atenea Sánchez.
atenea@inperfecto.com.mx
¡Hola!
¿Cómo estás? ¿Cómo va tu casi última semana del mes de mayo? Ya casi llegamos a la mitad del año, cuéntame, ¿qué tantos viajes has hecho? ¿alguno de los que te he recomendado? Espero qué si no has tomado tu mochila, lo hagas pronto porque el tiempo se pasa volando. Y volando me fui a este viaje, del que vengo a platicarte el día de hoy.
Tlaquepaque, Jalisco, es uno de los rincones más tradicionales de la perla tapatía, es un lugar muy tranquilo, está a tan sólo 16 kilómetros del aeropuerto de Guadalajara, es una ciudad reconocida por su tradición artesanal, sus técnicas artesanales en cerámica y alfarería.
Pasear por las calles de Tlaquepaque, es conocer varios de sus atractivos turísticos, entre ellos se encuentra el emblemático Jardín Hidalgo, su bello parque cuenta con una fuente, un kiosko y además es el lugar de reunión para fiestas y eventos locales.
Se encuentra sobre la Calle Independencia, en pleno centro de Tlaquepaque y en la zona turística más importante de la ciudad.
Otro lugar imperdible es el famosísimo “Parián”, este lugar se fundó alrededor de 1878 como un tianguis para la venta de artículos entre pueblos indígenas de la zona. Actualmente, es un lugar donde la música, las artesanías y la bebida se unen para para ofrecerte un exquisito manjar para todos tus sentidos.
Culturalmente, encontrarás el museo regional de la cerámica, sobre la avenida Independencia 237 en el Centro de Tlaquepaque, dentro de una residencia del siglo XVII y en su interior guarda una hermosa colección de cerámica. Este sitio, es digno de conocer, en especial, para sentirse orgulloso de lo que artesanos mexicanos aportan al mundo.
No puedo despedirme, sin platicarte de la gastronomía, en este rincón tapatío, podrás deleitarte con una deliciosa birria, una carne en su jugo típica de la región, sin duda alguna, no puedes irte sin probar una famosa torta ahogada y que mejor que acompañar todo lo anterior de una de mis refrescantes bebidas favoritas, originaria de Jalisco: el tejuino, es un fermentado de maíz, con piloncillo, se bebe con jugo de limón, sal de grano y mucho hielo, el simple de hecho de escribirlo, ya se me hizo agua la boca.
Disfruta de recorrer este y otros municipios tapatíos, a través de mis aventuras.
¡Nos leemos en el próximo viaje!
No olvides seguir mi columna y nuestras otras secciones a través de nuestro FB.
#TurismoSustentable
