Editorial

Próxima parada: TOKIO ¿2020?

#InPerfecciones
En un acto protocolario más, el presidente de México: Andrés Manuel López Obrador abanderó a parte de la delegación mexicana que ira a participar en los próximos Juegos Olímpicos.

 

 

Jorge García Vielma 
jorge.garcia@inperfecto.com.mx 

Cuando a los deportistas se les pregunta ¿cuál es la mayor recompensa de forjar una carrera en el Deporte? Bastantes respuestas coinciden en que la principal de sus satisfacciones es competir y ganar a nivel mundial para poder escuchar el himno nacional y ver la bandera en lo más alto; parece ser que al llegar este momento todo ha valido la pena y se ha cumplido, principalmente con la patria. Sí, las líneas anteriores tienen consigo una fuerte carga de nacionalismo, podría llegar a sorprender si apenas se comienza asociar al campo deportivo con estas temáticas, pero hay que tener en cuenta que estas relaciones son cada vez más visibles.

¿Qué se puede estudiar en un acto de abanderamiento? Bastante, la pregunta inicial sería ¿por qué? sin duda existe un simbolismo que el máximo mandatario del país aliente a los atletas mexicanos para que compitan de la mejor manera en nombre de México. El llevar una bandera por delante ya dice mucho, de entrada se puede ver como una carga para el deportista porque ya no solo competirá por él sino que ahora lo hace por todo un país, ¿por qué normalizar el discurso de ir a poner el nombre de la nación en alto? Muchas de las veces, aquellos que eligieron ser deportistas de alto rendimiento fueron abandonados por el Estado cuando requerían de algún apoyo, tiempo después es éste mismo quién busca apropiarse de un triunfo que a todas luces no le pertenece. El Deporte también es político. 

Andrés Manuel López Obrador no estuvo solo en dicho acto, ¿quién lo acompañó? Las titulares de la CONADE, SEP, la Jefa de Gobierno de la CDMX, los Secretarios de Marina y de la Defensa Nacional y el Embajador de Japón en México, ¿qué representan dichos actores? En primera instancia era impensable llevar a cabo este acto sin contar con la presencia del máximo organismo del Deporte de la nación, por ello estaba Ana Gabriela Guevara; pero que del actual gabinete hayan estado los representantes del sector educativo y de las fuerzas armadas ya dice mucho. Se suele contemplar que la actividad deportiva está íntimamente ligada con los niveles educativos, es decir, quién practica un deporte automáticamente parece tener un porvenir en la escuela, esto no siempre sucede. ¿Las armas y el Deporte son compatibles? Un amplio sector de los deportistas de este país sale del Ejército o de la Marina, son personal a disposición de estas instituciones. Nada es casualidad, el sector deportivo es alcanzado por otros campos.

El presidente se comprometió ante los presentes a volverse a reunir con toda la delegación mexicana a su regreso y mencionó que todos recibirán un apoyo económico. Se vuelve a lo dicho unas cuantas líneas atrás, el Estado percibe que con el simple hecho de dar dinero a estas alturas ya está cumpliendo en contribuir al Deporte en México, pero esto no es suficiente. Las expectativas de conseguir medallas en estos Juegos Olímpicos no son muy altas, el camino para ganarse una presea olímpica comienza desde mucho tiempo atrás y ahí es donde el país tiene mucho trabajo por hacer, se sigue quedando muy corto a comparación de las potencias mundiales o al menos de los países del área. El Deporte es generoso siempre y cuando se use de buena manera, pero parece ser que siguen existiendo escépticos. Abanderar a un grupo de personas no es lo mismo que verdaderamente apoyarlas, sin duda alguna el discurso y los hechos deben cambiar.

Rueda el balón, rueda la vida. 

#InPerfecto