Editorial

CELEBRAR LO INACABADO.

#InPerfecciones
“Lo delicado del tema no es si le hace falta mucho o poco para completar a la construcción del aeropuerto, lo delicado es celebrar la entrega de una obra incompleta”

 

 

Carlos Rosas Cancino / @CarlosRosas_C
carlos.rc@inperfecto.com.mx

El subtexto de la inauguración del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles goza de una exquisitez de matices kafkianos, no solo por la elección de la fecha, que, evidentemente responde a la orgásmica fijación que tiene el Jefe del Ejecutivo con el fetiche ideológico que le representa Benito Juárez y todo lo que tenga que ver con este personaje; no, no es solamente esto lo que corona la inauguración de la parcialidad del Aeropuerto, lo interesante es el matiz de verbena popular que se montó para abrir las puertas del Felipe Ángeles, sería ingenuo creer que las expresiones de apoyo, los puestos ambulantes y las delicias culinarias vistas en la inauguración se presentaron de manera espontanea, sobre todo si de lo que se trataba era de aplaudirle al Presidente, total, lo de menos era si los servicios sanitarios tienen agua o no, o si los locales comerciales apenas y tienen un aparador improvisado, ¿a quién le importa eso si de lo que se trataba era de cumplir con el simbolismo?.

 

Funcional o no, horroroso o bello, lejano o sin infraestructura de acceso al conjunto, el Presidente ya lo inauguró y háganle como quieran, lo que haya costado ¿que nos puede interesar?, al fin que antes el PRI robaba más, ahora también se roba pero “con permiso” del pueblo –a decir de los nuevos potentados-, después de todo hasta entre ratas hay clases, así que nada de andar queriendo meter en el mismo saco a las mugrosas ratas “prianistas” junto con las mugrosas ratas “morenistas”, aunque en términos inclusivos y para no cometer el pecado de la discriminación estrictamente todas esas ratas deberían estar en el mismo saco, pero esa es mierda de otra letrina.

 

Revisemos la narrativa en torno a la inauguración del Felipe Ángeles, un aeropuerto “del pueblo y para el pueblo” -dice el Presidente-, lo interesante desde luego es que bajo esta lógica y con el sustento discursivo de que el ejército también es pueblo, la base aérea militar de Santa Lucía es efectivamente del pueblo y para el pueblo, es decir, del ejército y para el ejército y que tendrá algunas prestaciones para los civiles que gusten disfrutar como dijo Claudia Sheinbaum “silenciosamente” de sus instalaciones –cuando estén terminadas al 100%, claro está-, podríamos también traer a colación que si el discurso presidencial incluye a los integrantes del crimen organizado como parte del pueblo, la conexión viene por añadidura; en ambos casos podemos señalar que lo de menos es si existe una certificación internacional o si el estudio de impacto ambiental respalda el desarrollo de el tan cacareado aeropuerto.

 

Por otro lado el combate a la crítica puso sobre la mesa una de las famosas “cantaletas” del Presidente cuando se trata de descalificar las opiniones que no le son favorables, López Obrador se lanza impetuoso a decir que las críticas por la presencia de vendedores ambulantes son clasistas y racistas, sin embargo lo que encontramos nuevamente es una contradicción en el discurso, porque resulta que se combate el clasismo con más clasismo, se continua alimentando la narrativa de buenos contra los malos, de fifís contra pobrecitos pobres, de chayoteros contra objetivos periodistas incondicionales, o bien, lo que en argot “luchístico” sería el clásico “rudos contra técnicos” plasmado en la temática de los servicios sanitarios del aeropuerto, sin embargo, el artilugio de los ambulantes lejos de comunicar la máxima de que “con el pueblo todo y sin el pueblo nada”, termina comunicando el fracaso de un modelo económico que fomenta la informalidad y la inseguridad laboral de los trabajadores en México; el clasismo burgués lo dejaron de manifiesto los invitados VIP que llegaron muy cómodos en taxis aéreos para aplaudir al presidente, clasismo es aprovechar la condición de necesidad de los ciudadanos para acarrearlos a gritar consignas y cargar pancartas en favor de la Revocación de Mandato, en fin, la fiesta organizada para cumplir simbólicamente con la entrega de la obra gozó de muchos elementos que nada tenían que ver con los alcances ofrecidos, la tónica fue la misma, discursos engaña bobos, una conferencia mañanera redundante en un escenario maquillado, un escenario que incluso dio cabida al descaro corrupto con la presencia del General Salvador Cienfuegos, es decir, nada nuevo bajo el manto transformador.

 

Aunque las argumentaciones más recalcitrantes señalen que los opositores mueren de coraje y envidia por la inauguración del Felipe Ángeles en tiempo record, descalificando rabiosamente toda opinión contraria, como esos fanáticos que molestos “mientan madres” porque su equipo ha perdido, en sí, no se justifica tanta molestia si se supone que el Presidente les cumplió; afortunadamente y para felicidad de los fanáticos, es que los números y la práctica diaria confirmaran si el aeropuerto funciona o no.

 

Pongamos atención si de ahora en adelante por obligación moral, política y económica, el Presidente, Adán Augusto López, Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Mario Delgado, Martí Batres, Jesús Ramírez, Rocío Nahle, Gobernadores y Legisladores ocuparán regular y “silenciosamente” el Aeropuerto Felipe Ángeles, porque siendo tan extraordinario y magnífico como dicen, lo congruente sería que fueran ellos los que pusieran el ejemplo, y usarlo aunque fuera solo por marketing político, sería sensacional verlos abordar un taxi aéreo en el Aeropuerto Benito Juárez de la CDMX para dirigirse al Felipe Ángeles para y abordar su vuelo a Europa –claro, cuando haya vuelos para Europa-.

 

Lo delicado del tema no es si le hace falta mucho o poco para completar a la construcción del aeropuerto, lo delicado es celebrar la entrega de una obra incompleta, hacerlo, dice más de quién lo aplaude y justifica, que de quién embauca ingenuos fanáticos mientras utiliza de manera propagandista lo inacabado porque esa es la costumbre que tiene, recordemos que la entrega de los segundos pisos en la CDMX cuando era Jefe de Gobierno se entregaron inacabados y que fue la pauta para entregar obras plagadas de irregularidades en la CDMX de las administraciones que le sucedieron, alegóricamente podemos decir del Aeropuerto Felipe Ángeles que ojalá no se eleve de manera efímera tan alto que su caída sea estrepitosa.

#InPerfecto