#InPerfecciones
Al final del día, la incompetencia es más peligrosa que cualquier virus.
Cruz Hernández Sánchez / @IamMillennial_
cruzhendez@gmail.com
Al final del día, la incompetencia es más peligrosa que cualquier virus.
México se enfrenta a uno de los retos más grandes en el sector salud con un mandatario que lleva estampas religiosas en la cartera y que debe realizar rifas para garantizar insumos para el sector salud, un mandatario que se niega a recortar presupuesto para sus “proyectos prioritarios” (una refinería y un tren en medio de la selva) y destinar esos recursos a la compra de equipo médico, un mandatario cuya fuerza moral lo vuelve inmune a un virus que ha consternado países enteros, poniendo a prueba la integridad de instituciones económicas y de salud.
A más de un año de la arrasante victoria de López en la contienda presidencial, México continúa esperando resultados, los discursos con los cuales logró enamorar a la población, lentamente pierden su esencia y se revelan como palabras al aire, escuchadas por oídos cansados que necesitaban un cambio, ofrecieron un gobierno diferente a la “mafia del poder”, pero siguen permaneciendo sus viejos hábitos, la manipulación de cifras es una práctica que continúa presente en esta administración. Durante esta pandemia las contradicciones no han faltado: un día, los datos muestran una aparente fortaleza de México ante una crisis; después, las cifras cambian para echarnos en cara las carencias de nuestro sistema de salud; de un día para otro, el número de infectados aumenta de una manera alarmante. ¿No se suponía que el INSABI estaba preparado?.
El servilismo de los funcionarios dentro del sector salud, agrava el problema. En lugar de tomar acciones para el beneficio de los mexicanos su actuar es una constante justificación de las medidas ya implementadas por la administración de López, de nada nos sirve tener personal altamente capacitado si su única función es ser un adulador más de la 4T. No se tiene un plan, no se tiene objetivos y lo más importante, no se tiene un presidente.
Desde decisiones arbitrarias y medidas de contención aplicadas de manera tardía, la administración de López deja en claro, lo más importante es proteger la figura presidencial, temas como salud, seguridad y economía pueden esperar, la prioridad es afirmar que todo marcha de maravilla y no prestar atención a esas pequeñeces.
Esta pandemia le vino como anillo al dedo a los ciudadanos, a un año de las elecciones del 2021 hay varios puntos que se deben recordar para tomar una decisión:
- Recordemos el actuar de López ante una crisis.
- Recordemos su nivel liderazgo.
- Recordemos sus discursos para apaciguar al pueblo.
- Recordemos que López carece de todo eso.