Editorial

Los aspiracionistas de Palacio 

#InPerfecciones
Para evitar situaciones que enturbien el discurso de austeridad y anticorrupción, el Presidente decidió enviar a sus tres hijos mayores fuera del país, una estrategia que, sin embargo, ha resultado fallida.

 

Daniel Dueñas Flores  / @Daniel_Duf 
daniel.duenas@inperfecto.com.mx

 

En México desde hace algunos años ha comenzado a preguntarse sobre si ya es o no un país de clases medias. Los argumentos se basan en los porcentajes de población con acceso a bienes de consumo durables tales como los electrodomésticos y los de contenido tecnológico telefonía celular; otras mediciones basadas sólo en criterios económicos establecen algún rango más o menos arbitrario alrededor de la mediana de los ingresos per cápital mediciones relativas o también, a partir de criterios diversos y estudios empíricos, establecen una cota mínima y una cota máxima de ingresos corrientes que definirían el espectro económico en el que cabría ubicar, a juicio del analista, a las clases medias del país. 

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y con su análisis ‘Cuantificando a la clase media en México’, el 42.4% de los hogares mexicanos, en los que vive el 39.2% de la población de México, pertenece a clase media. Esto, de acuerdo con el resultado obtenido al término de la primera década del siglo XXI.

Dicho estudio tomó en cuenta aspectos cuantitativos y cualitativos sobre la cuestión económica y sociológica de la población.

En el ámbito urbano, el 50.1% de los hogares con el 47% de los habitantes en dicho pertenece a clase media. Por otro lado, en el ámbito rural, solo el 28% de los hogares, con el 26% de la población, pertenecen a la clase media.

En términos absolutos, 12.3 millones de hogares y 44 millones de personas conforman ese estrato social en México. El Inegi apunta que tres cuartas partes de de ambas magnitudes se encuentran en el ámbito urbano.

A manera de venganza por lo ocurrido en las pasadas elecciones en la Ciudad de Mexico el presidente a decidido tomar venganza contra quien considero eran los reponsables de lo ocurrido LA CLASE MEDIA . Sin embargo ha olvidadado que sus hijos pertenecen a ese especimen humana que según sus palabras son aquellos que aspiran a tener mas y tiene deseos de progresar en la vida 

Para evitar situaciones que enturbien el discurso de austeridad y anticorrupción, el Presidente decidió enviar a sus tres hijos mayores fuera del país, una estrategia que, sin embargo, ha resultado fallida.

 

José Ramón, Andrés Manuel y Gonzalo Alfonso López Beltrán se convirtieron desde hace tiempo en un lastre para los objetivos de su padre, por la ambición que mostraron en sus labores políticas en la CDMX y en el Estado de México, por sus relaciones con el sector empresarial y por los excesos mostrados en sus vidas privadas.

 

El más grande de los hermanos, José Ramón López Beltrán, fue el primero en caer en el exilio, luego de que iniciara una relación sentimental con Carolyn Adams, una ejecutiva brasileña encargada de cabildear contratos en el sector energético para Cava Energy y antes para British Petroleum.

 

Más allá de los lujos, los proyectos del segundo hijo del mandatario son los más ambiciosos, al grado de que  construye desde el gobierno de su padre una superestructura de funcionarios jóvenes que reportan primero en su escritorio, y después en el del titular del Ejecutivo.

 

Los hijos del Presidente, quienes supuestamente se alejarían de la política y el gobierno durante el sexenio, no hicieron lo uno ni lo otro, y además están boicoteando, con su estilo de vida, el discurso político de su padre.

 

El Presidente olvida que el derecho de progresar es un derecho universal que no cambia de un pais a otro como pretende hacerlo con sus hijos, MEXICO ANTES DE SU LLEGADA ERA UN PAÍS QUE A PESAR DE LAS DIFICULTADES PODIAS PORGRESAR. Sus hijos aunque en mi opinion con dinero he influencia de la presidencia han porgresado como la mayoria de los mexicanos deberiamos hacerlo. 

 

#InPerfecto