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El año 2021 lo comenzamos la gran mayoría de los mexicanos con un cumulo de esperanzas que pocas veces se había visto en el colectivo ciudadano, la crisis sanitaria vino a empeorar la ya de por si crisis económica.
Daniel Blanquel / @DHBlanquel
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El año 2021 lo comenzamos la gran mayoría de los mexicanos con un cumulo de esperanzas que pocas veces se había visto en el colectivo ciudadano, la crisis sanitaria vino a empeorar la ya de por si crisis económica que se vive desde que comenzó este gobierno, misma que es equiparable a la vivida hace casi cien años, en 1933, ni siquiera con la crisis económica del llamado efecto tequila, ni con la crisis mundial del 2009 la economía mexicana se desplomo tanto como lo sucedido en el pasado año 2020.
Los mexicanos sabíamos que el cambio de año no haría que el virus que nos aqueja y que desafortunadamente ha costado miles de vidas en nuestro país desaparecería de la noche a la mañana, pero si teníamos la fe en que las cosas mejorarían circunstancialmente, nos adaptaríamos a una nueva normalidad que permitiera el desarrollo de las actividades comunes y que por añadidura comenzaría a recuperarse la economía tan deplorable que esta cuarta transformación ha permitido.
A finales del año pasado se anunció con gran usanza la llegada de dosis de la vacuna que todos esperábamos para combatir este virus, empero, a la fecha la cantidad de vacunados en nuestro país es sumamente inferior a la del promedio de otros países con la misma o similar densidad poblacional a la de México, hoy ya termino enero y no se ha vacunado a todo el personal médico, ni público ni privado, ni tampoco ha comenzado la vacunación masiva de adultos mayores que prometió y anuncio el Presidente López Obrador y ni hablar de la economía verdad.
El indicativo epidemiológico que conocemos como semáforo lleva todo lo que ha transcurrido del año en color rojo y retrocediendo en las entidades que ya habían logrado llegar al color verde ahora están nuevamente en amarillo o naranja y como he dicho antes gran parte de la responsabilidad de esto es de nosotros como ciudadanos que no mantenemos las medidas necesarias para evitar la propagación de contagios de SARS-CoV-II, pero no eximo de la mayor responsabilidad que tienen las autoridades de este país al no dictar leyes o medidas donde se obligue a los ciudadanos a ser responsables de ellos mismos y hasta cierto punto empáticos para que se cuiden y cuiden a las personas de su entorno.
Quienes pertenecen a las filas del actual gobierno no quieren implementar medidas tan básicas y sencillas como el uso del cubre bocas, según ellos por acatar a plenitud la carta magna que nos caracteriza como un país de libertades, pero, que no las libertades de él terminan donde empiezan las mías, por qué seguir permitiendo que la gente por ignorancia o por ideas retrogradas salgan a las calles y hagan uso del trasporte público o de espacios sin ninguna medida de protección, esto ha originado que países como Canadá, Estados Unidos, España entre otros restrinjan la entrada de connacionales a su territorio, toda vez que como ellos lo argumentan, el manejo de la pandemia en México es pésimo, y tan es así que la revista de mayor credibilidad en cuestión médica a nivel mundial publicó que México es el peor país para vivir esta pandemia.
Durante las últimas fechas hemos visto a través de los medios de comunicación que el número de contagios aumenta cada día, la ocupación hospitalaria no disminuye, esto sin contemplar que el propio INEGI anunció que los números que se dan a conocer día con día en las conferencias de las 19 horas tiene números menores a los reales, pues una gran cantidad de infectados y fallecidos no son atendidos en el sector salud de nuestro país y por ello no se ven reflejados en los numero publicados.
Aunado a esto los familiares de los pacientes nos enfrentamos a la escases de tanques de oxígeno que y al propio oxígeno para rellenar dichos tanques una vez que por fortuna o milagro conseguimos uno, a la escases de medicamentos, que dicho sea de paso no son nada económicos y que desafortunadamente en un país con números rojos en su finanzas es imposible costear dichas medicinas, y aun tiene la desfachatez el gobierno federal en voz de la Secretaria de Gobernación la ministra en retiro Olga Sánchez Cordero en decir que vamos bien y que se comienza a ver la disminución en el número de contagios.
Yo me pregunto, en verdad ellos ven otra realidad o de plano creen que los mexicanos somos estúpidos, perdón por la palabra, pero es inaudito que hagan ese tipo de declaraciones en momentos donde la vida de todos los que aquí vivimos se encuentra en peligro, Andrés Manuel y su equipo de trabajo anuncian que contrajo el virus y justo el día que lo hacen público el señor viajo a los estados de Nuevo León y San Luis Potosí, realizo estos viajes en aviones comerciales, por su afán de querer vender la imagen de austeridad, sin embargo esta austeridad puso en riesgo a todos los pasajeros y tripulantes de los aviones en los que se trasladó, así como a toda la gente que estuvo cerca de él durante los eventos públicos y privados que mantuvo, este presidente es tan austero que a pesar de que es su costumbre no lo vimos que estuviese peregrinando como muchos hermanos mexicanos en distintos hospitales públicos del país para que pudiese ser atendido, al mesías de Macuspana se le atiende en las inmediaciones de Palacio Nacional, mientras tanto que su pueblo se sacrifique.
Las huestes del gobierno federal prefirieron renegociar la adquisición de vacunas y recibir menos de lo que se había negociado en un principio, hoy ya no hay vacunas, ya no hay producción de las mismas y los más de 120 millones de mexicanos seguiremos esperando a que se nos aplique dicha vacuna en algún momento si es que no morimos en la espera.
El partido del cual emano el actual gobierno es el único que se encuentra haciendo publicidad con la llegada de las vacunas, cuando lo que deberían estar haciendo es apoyar a la población con leyes que favorezcan su salud, podrían distribuir oxigeno gratuitamente y no defender la decisión de que los servidores de la nación tengan que estar en los puestos de vacunación y mucho menos que estos sean a quienes se les aplique la vacuna cuando aún hay personal médico de la primera línea de combate que no ha podido ser vacunada.
Pero no olvidemos que estamos en año electoral, un año en el que se renovaran más de 21 mil puestos de elección popular, dentro de ellos se renovara la cámara de diputados federal y que esto significa que se mantengan las políticas actuales que tanto daño han causado a la economía, la salud, el desarrollo, el medio ambiente y muchas otras cosas más o que se pueda comenzar a dar un cambio que en verdad beneficie a los ciudadanos, y este cambio se puede dar si MORENA pierde la mayoría en el congreso.
Seguramente habrá quienes no estén de acuerdo con lo aquí planteado, si ustedes tiene otros datos como diría López los invito a que los exhiban, pueden contactarme en mis redes si lo creen pertinente para dar una réplica a estas líneas, recordemos que nada es personal pero al igual que ustedes lo que más deseo es que a mi país con todo y su gobierno le vaya bien.
Pero bueno como siempre, la mejor opinión la tiene usted.
