#Sexualidad
El difícil arte de ser mujer es una mezcla de aprendizajes, de lucha, día a día es empezar a vivir de nuevo.
Rosario Aguilar / @rosariogaguilar
rosario.aguilar@inperfecto.com.mx
La historia nos va a contar la vida de muchas mujeres que a lo largo de su vida han desafiado como se puede la vida que les tocó, escucharemos o leeremos historias de mujeres destacadas, que de alguna manera encontraron el apoyo de la familia y lograron reestructurar su educación, su cultura, incluso sus tradiciones, y lograron abrir una brecha para que más mujeres siguieran por ahí, pero también hemos sabido de las que murieron en el camino, o en el intento, ya sea en manos de quien la vio pasar para despertar su enfermizo deseo, o de aquella persona en quien deposito sus ilusiones.
A lo largo de la historia reconstruyendo a las mujeres del pasado, el pilar de la familia, la contenedora, quien resolvía los problemas, la mujer que sabía que hacer, la que callaba por qué el único que levantaba la voz era el hombre de la casa, el que disponía de las propiedades de su mujer, el que orgulloso le daba su apellido y ya era la “señora de” quien tenía que cuidar y proteger como la propiedad que había adquirido, en todos los aspectos, quien organizará el “hogar” educar a los hijos y color sus deberes maritales, el mandil que tiernamente portaban guardaban las lágrimas de muchas de ellas de conformidad, hubo quien quizá se enfocó en ello con esmeró, quien aceptó el rol y con orgullo lo acepto de buena gana, pero también están aquellas que por tradición lo tomaron, por qué en esta sociedad la palabra se cumplía, y algunas mujeres fueron la unión de honorables familias, q ellas que fueron educadas para llevar un buen matrimonio, un ejemplo de buenas mujeres, las que callaban, las que su opinión no se escuchaba, han pasado los siglos y es evidente que algunas cosas no han cambiado, cambian los nombres, las caras, cambian los rostros, pero aún en la actualidad moderna la vida se detiene para alguna mujer que quiere romper el esquema y salir a reconstruir sus pedazos de historias.