Editorial

TRISTEZA.

#InPerfecciones
Es sumamente triste ver que la paranoia tiene atrapada a la población en un estado de shock muy injusto, ¿será muy complejo para las autoridades aplicar la ley?

 

Carlos Rosas Cancino / @CarlosRosas_C
carlos.rc@inperfecto.com.mx

La turbulencia social es evidente, los feminicidios que han tenido amplia visibilidad los últimos días pusieron al rojo vivo nuevamente un descontento que ha estado de manifiesto en las calles desde el año pasado no solo por el dramatismo que significa conocer casos tan duros de mujeres asesinadas que constantemente aparecen en las calles como si fueran desechos, sino como prueba de una descomposición social que nos rebasa a todos y en todo sentido.

Efectivamente cambiar el paradigma ya no es solo fundamental, es urgente, la conciencia que debe hacerse respecto a como se está actuado como sociedad frente a casos tan dolorosos como el de la menor Fátima incluye a las autoridades que no están dando resultados satisfactorios. Ya se ha comentado ampliamente sobre la normalización de la violencia como si se tratase de una vergonzosa tradición que nos está ahogando por decir lo menos.

Volver a escuchar discursos que hablan de la mejora de condiciones para las mujeres, niñas y niños nos recuerda que hay una distancia muy grande entre las palabras y los hechos; las autoridades no terminan de superar las montañas de papeleo y burocracia que les permitan ejercer la ley de manera expedita y al pie de la letra, obviamente la desconfianza ha permeado tanto que cada vez vemos más escenas donde la toma de justicia por propia mano se ha vuelto tambien cotidiano.

Es sumamente triste ver que la paranoia tiene atrapada a la población en un estado de shock muy injusto, ¿será muy complejo para las autoridades aplicar la ley? ¿es incapacidad y desconocimiento?, todas las preguntas son válidas, todas necesitan respuesta, la filiación política es lo de menos cuando de seguridad de la población se trata, pero esto no parece encontrarse en la agenda de un Presidente de la República, una Gobernadora de la CDMX o un Secretario de Seguridad que continúan hablando de una “estrategia” que no se ve reflejada más que en discursos y presentaciones propagandísticas de un régimen que ideológicamente se encuentra combatiendo a otro sistema en el que ha encontrado un enemigo imaginario para culparlo de todos los males y de todas las elucubraciones en su contra.

El momento de tomar con seriedad el tema de la seguridad para todos los ciudadanos se esta pasando de largo para el Gobierno que cuando se le ocurra despertar de su letargo ideológico es probable que se haya convertido en un sistema fallido más que terminará por afectar de manera todavía más profunda a la sociedad. El reclamo es constante, los casos también y la falta de empatía y capacidad se están convirtiendo en cómplices de la delincuencia porque también por omisión se cometen delitos.

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