#InPerfecciones
Si Futuro 21 no consigue el resultado esperado, estaremos viendo a políticos en orfandad partidaria buscando refugio en otras madrigueras.
Carlos Rosas Cancino / @CarlosRosas_C
carlos.rc@inperfecto.com.mx
De pronto y aunque ya había sido anunciada un “ofensiva” para resistir –un poco más- a la extinción, el Partido de la Revolución Democrática se ha sumado a la asamblea de la plataforma “Futuro 21” que representa para el partido del sol azteca el clavo ardiente al que se aferra para no caer en el abismo. Dicha asamblea más que reunión política de personajes, parece reunión de porristas que buscan conformar un frente u opción para los ciudadanos que se encuentran hartos de ver como los mismos políticos gozan de los beneficios del poder o toman malas decisiones, justo en lo que muchos de ellos se convirtieron.
Sin embargo, esa postura de ser una opción ciudadana o contrapeso político para el gobierno se antoja ridícula y delata la desesperación por conservar las prerrogativas que otorga el negocio del partido político, y para el PRD quedó claro que aquellos buenos tiempos donde bajo el discurso de izquierda y el comportamiento de derecha terminaron por reventar aquella opción que se presentó como respuesta al resultado electoral del 88, pero como dice la canción de Luis Miguel “ya nunca más”.
Futuro 21 ha logrado reunir figuras destacadas de otros tiempos y otros partidos en torno a una plataforma que de manera discursiva se ha vuelto crítica de un sistema político que ha planteado la transformación del país. Tal parece que la estrategia de reciclar y dar un segundo aire a esos personajes de la política que desgastados por el intenso jaloneo por el poder terminaron por eclipsarse ahogados en un discurso y acciones donde se dedicaron a defender su posición y ventajas olvidándose de la premisa de atender las necesidades del país.
Personajes como Gabriel Quadri, José Narro, Miguel Ángel Mancera, Jesús Ortega, Jesús Zambrano, Purificación Carpinteyro, Beatriz Pagés, Cecilia Soto entre otros buscan posicionarse rumbo al 2021, auto infringiéndose fecha de caducidad en sus aspiraciones, dejando claro que la pugna de políticos molestos por ver el negocio caer o sus ambiciones personales son lo que les hace perderse el asco y soportarse en vías de no desaparecer como fuerza política, tratando de hacer uso de la estrategia que ocupó –y sigue ocupando- MORENA de atraer a personajes para expiarlos de sus culpas bajo el discurso de que es de sabios cambiar de opinión.
Las críticas que recibió Futuro 21 por la reunión del pasado sábado no son más que el resultado lógico de los cambios en el mapa político al que la lectura ciudadana y de los que integran la parte alta de la rueda de la fortuna política minimizan de manera burlona, sin embargo, lo que queda para la reflexión es que la gran familia política sigue peleando entre si dejando de lado todos esos pendienteS que siguen formando parte de ofrecimientos de campaña que se diluyen con el paso del tiempo y la consecución de escaños en el poder.Si Futuro 21 no consigue el resultado esperado, estaremos viendo a políticos en orfandad partidaria buscando refugio en otras madrigueras.