1968, EN LA MEMORIA DE MÉXICO
Miguel Angel Millán Cancino
miangel.millan@inperfecto.com.mx
Hemos estado hablando de ese contexto internacional que influenciaron los sucesos en México y en gran parte del mundo en 1968, no podemos entender que lo que pasa en el mundo no tiene influencia en nosotros dentro de este territorio.
Haciendo más sobre la relatoría hablemos de que el mayo parisino de 1968 comenzó con una serie de movilizaciones estudiantiles y tomas de universidades en toda Francia ante la respuesta de las autoridades universitarias que cerraron la Universidad de La Sorbona. El uso de la policía para la desocupación de los patios de la Sorbona fue el detonante para el movimiento, al que le sumaron los trabajadores. No de forma gratuita, los empresarios franceses habían aplicado una serie de políticas anti-obreras que sometían a presiones a los trabajadores. Debajo de la superficie existía un gran descontento entre la clase obrera.
El conflicto se extendió, la presión al Gobierno se da mediante la mayor huelga general de la historia moderna de la humanidad, los trabajadores franceses salieron a las calles de forma impresionante y paralizaron prácticamente todo el país, se tomaron fábricas, se controlaron precios, etc.
El conflicto concluyó con adelantar las elecciones, con un salario mínimo garantizado, vacaciones, que el Gobierno ofreció.
Así, en forma aparentemente coincidente en gran parte del mundo, los jóvenes tomaron las calles para hacer valer una nueva condición en el equilibrio político de sus países. Los movimientos estudiantiles se convertían en un verdadero poder que trastocó ese año a más de una sociedad y que modificó de manera radical la praxis política en todo el mundo.
La generación de la posguerra, aquella que había nacido después de la segunda Guerra Mundial, que no había llegado todavía a los escalones del poder, de repente en forma masiva, encontraban que mediante simples manifestaciones callejeras ponían en jaque a las instituciones y cuestionaban el status quo.
La generación en el poder, formada en su mayoría por hombres que crecieron y llegaron al poder al calor de los eventos bélicos de la primera mitad del siglo XX, desde revoluciones hasta conflictos globales, enfrentaba al fenómeno social mediante el uso de la fuerza y la represión; el entendimiento y el diálogo lo dejaban para menor ocasión.
Era difícil comprender que una generación que en su mayoría no había conocido la guerra convencional, que culturalmente había reproducido la imagen de la insatisfacción juvenil en el ícono del rebelde sin causa, por vez primera en esa rebeldía la encauzaba políticamente y causaba escozor en gran parte de la sociedad mundial. Los movimientos universitarios sucedidos en el mundo en la década del 60, tiene en común su carácter secularizador y anti-autoritario.
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