#InPerfecciones
En días recientes algunos encabezados deportivos fueron acaparados por una situación comprometedora en la que está envuelto el futbolista español Gerard Piqué.
Jorge García Vielma / @7Vielma7
jorge.garcia@inperfecto.com.mx
La inmediatez a la cuál está sometido el mundo es un hecho innegable y totalmente visible, bueno, este fenómeno puede ser visto desde cualquier visión pero a veces el hecho de estar bajo sus influencias hace que no haya tiempo para dedicarle atención. Se ha vuelto común leer en los medios impresos y electrónicos que la era digital está más presente que nunca y se espera un crecimiento exponencial en un corto plazo, dicha premisa se comprueba diariamente al observar la influencia que ejerce este campo en todos los demás; las vidas ya no son las mismas desde este boom. Existen riesgos, y uno de ellos se encuentra en la posibilidad de perder el control de material propio y que éste se haga de dominio público, tal y como ahora le sucede a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), su presidente Luis Rubiales y el ex seleccionado español Gerard Piqué.
¿Por qué no se está hablando a profundidad del tema? De inmediato el hecho que relaciona al futbol español se viralizó en redes sociales principalmente porque el futbolista catalán funge como uno de los mayores protagonistas; el tema cuenta con elementos bastante ricos para desarrollar un análisis profundo y no solo quedarse con una inercia tendenciosa dictada por algunos medios de comunicación. A manera de resumen el escándalo obedece a la filtración de unos audios pertenecientes a la RFEF dónde se puede escuchar la injerencia de Gerard Piqué para negociar una comisión de un poco más de 25 millones de dólares para disputar la Supercopa de España fuera del país ibérico y aterrizarla en Arabia Saudita.
Inmediatamente que las declaraciones se filtraron comenzaron a hacer eco en el ambiente deportivo, pero esto obedecía solamente a que un jugador de la envergadura de Piqué estaba en medio de todo este fuego cruzado. El trato que se ideó en estos audios indica que el Real Madrid y Barcelona serían los principales beneficiados en cuanto a repartición de millones, sin dejar de lado al par de equipos restantes y obviamente a la RFEF; a todo esto ¿alguien pensó en la figura de los jugadores? Resulta complicado generar y creer en una teoría sobre que el dinero haya sido repartido entre los integrantes de los planteles, con base en algunas situaciones similares resulta más factible creer en que solo las arcas de los clubes fueron las beneficiadas, y sí, nuevamente a costa del capital humano que recae en los jugadores.
La RFEF precedida por Luis Rubiales tienen como principal argumento el otorgarle un nuevo valor y frescura al torneo de la Supercopa debido a que éste solía ser más una piedra en el zapato para el ritmo generado por los equipos españoles en las fechas que se realizaba la final. Se generó todo un plan mercadotécnico con la intención de que el balompié ibérico fuera un negocio apetecible para cierto sector de inversores, siendo Arabia Saudita la nación que alzó la mano y logró hacerse de los derechos de transmisión. Lo antes narrado es una escena más en este libreto llamado globalización, la cual evidente e inevitablemente han alcanzado al mundo del balón, para unos ésta tiene secuestrado al futbol y al Deporte en general, lo normal sería no sorprenderse y seguir con la vida.
Este caso refleja nuevamente que desde hace un tiempo el Deporte se deja en manos del mejor postor, lo económico se prioriza por encima de lo deportivo a pesar de quiénes piensan que ambas posturas son complementarias y funcionan a la perfección. La naturalidad con la que Gerard Piqué declara sobre la repartición de la comisión entre los involucrados es la muestra de la normalización de este tipo de fenómenos, al final del día el torneo se disputó en Medio Oriente, las gradas estuvieron casi vacías y el desgaste adicional al que se sometió a los jugadores fue considerable y poco retomado.
El sector romántico del futbol tiene una bandera que defiende en este caso y es la del sentido de pertenencia. Pareciera hasta lógico que haya mayor simbolismo en disputar la Supercopa de España en territorio español antes que firmar un contrato para llevar el torneo a otra parte del mundo, aunque los dueños del balón solo piensan en como generar mayores ingresos. Los audios filtrados son un síntoma, se unen a los casos de la próxima Copa Mundial en Catar, la propuesta de una ‘Súper Liga Europea’, las giras por Estados Unidos, entre otros.
Los billetes seguirán imponiendo la tónica que debe seguir el Deporte, ojalá éste siga otorgando momentos que ninguna cifra económica pueda comprar.
Rueda el balón, rueda la vida.
