Marzo 8, 2018
Rosario Aguilar.
rosario.aguilar@inperfecto
¿Cómo se viven las fantasías sexuales en pareja? Se puede pensar que como ya se consolidó una relación estable, ya se tienen hijos, ya se tienen responsabilidades, cómo pareja se limitan a tener relaciones cómo parte del paquete, solo por cumplir con el compromiso a la pareja y se olvidan de el hombre o la mujer que hay detrás del padre o la madre.
Esto no debería de ser así, en la complicidad de compartir una vida juntos, el tener relaciones tiene que seguir siendo parte importante de su relación, la comunicación en pareja nunca debe acabar, de repente se puede pensar que ya sabemos lo que queremos y damos por hecho algo, no siempre funciona, una pareja que sienta la confianza de pedir, guiar a la pareja a estimular y seguir conociendo y reconociendo los cuerpos tendría que ser lo más natural y normal. Vamos a modificar la apertura en buscar juegos, escapar un rato de lo cotidiano, hay una frase que dice que es verdad que la costumbre es más fuerte que el amor y suele pasar , la costumbre, la monotonía, lo cotidiano la falta de interés se va haciendo un bloque que termina asfixiando la relación.
Si estás en una relación de pareja está claro que hay algunas normas que garantizan su funcionamiento: habiendo acordado si es o no amor libre, si hay proyecto común, qué tipo de entornos y momentos comparten y hasta qué temas son un tabú para la pareja. En ese ambiente de convivencia en el que las fantasías sexuales tienen cabida, tanto si entran o no y que tanto permitirían ustedes. Los expertos dicen que hay dos tipos de fantasías, las permitidas y las prohibidas.
La pregunta seria, ¿puedo contárselo a mi pareja?, podemos decir que sí, otra posibilidad es que actúes , recurrir a lencería sexy o disfraces que den pie a juegos de roles entre ambos, podría considerarse una fantasía sexual permitida.
Si tu fantasía tiene que ver con alguna vestimenta, con incorporar juguetes o accesorios o lugares nuevos como una escapada a un hotel o probar un nuevo rincón de casa, ¡no lo dudes!
Los riesgos de la no aceptación claro que se dan, desde no aceptar que somos seres individuales y que la satisfacción personal es fundamental para no terminar siendo un objeto sexual, y en la actualidad se da en los dos casos hombres y mujeres, siendo las mujeres un porcentaje alto pero no podemos negar que el hombre ya se encuentra en un escaparate de deseo.
El respeto, la confianza, la complicidad, el amor entre otros elementos serian base para una sana relación antes que nada recordemos como lo vimos al principio de esta serie de temas es también por salud, la represión o frustración se van anidando en el cuerpo y al final termina por hacer sentirse desvalorado o desvalorado, usado, usada, un simple objeto más de casa.
Cuéntanos ¿te atreverías a contarle a tu pareja tu fantasía?
Atrévete a comentarnos sobre esto, y sobre la tabla que te ponemos, ¿con esas o con otras?