#InPerfecciones
López Obrador en eterna campaña, lo mismo en las conferencias matutinas como en la plaza, o a través de una consulta popular, o la próxima revocación de mandato, siempre con el afán de satisfacer los egos del jefe del ejecutivo.
Alexis León González / @alexisgdl
alexis.leon@inperfecto.com.mx
El presidente de México hizo de la eterna campaña su modus vivendi, mañana, tarde y noche enarbola su movimiento y despotrica contra sus críticos, contra sus adversarios, dando como resultado pocas acciones de gobierno trascendentes en su administración, virtud para algunos, defecto para otros “La terquedad” del presidente López Obrador lo ha llevado a que en su gobierno existan muchos más discursos y casi nada de acciones, tal es el caso de la corrupción que son contadas las acciones concretas para su lucha, o más aun para judicializar estos delitos, ya no se diga de recuperar un solo peso de los múltiples saqueos que ha sufrido la hacienda pública.
En vez de hablar de los múltiples problemas que enfrenta México, el discurso oficial es minimizar y atribuir siempre a los adversarios el querer desestabilizar a su movimiento a su gobierno, luego inmediatamente después sigue la eterna campaña vanagloriando su gobierno y echando pestes al pasado, siempre complacientes con el del presidente.
Más de la mitad del sexenio ha transcurrido y todo parece indicar que la principal acción del gobierno es la campaña, es la polarización todo orquestado por un excelente orquestador del ajedrez político, nos guste o no, pero así ha quedado demostrado, con una oposición aniquilada, inoperante, timorata que simplemente es observadora de la política nacional y un presidente que simplemente sabe llenar muy bien su ego.