Editorial

POLITIZAR.

#InPerfecciones
Politizar lo que se ofreció “no politizar” es una de esas tantas cosas que no se han cumplido, o  al menos no está claro bajo que condiciones.

 

 

Carlos Rosas Cancino / @CarlosRosas_C
carlos.rc@inperfecto.com.mx

 

Lo que sobran son pretextos, incluso si nos remitimos algunos años atrás cuando el señalamiento hacia los contenidos de televisión llegó a ser lapidario por su baja calidad, tristemente podemos darnos cuenta que esto ni ha cambiado y se han sumado espectáculos que se suman al amplio abanico de oferta de contenidos informativos, es decir, en internet también encontramos mucho contenido basura, y si, efectivamente no solo hablo de la mañanera presidencial que acapara la línea informativa del día con el “cantinfleo” interminable del Presidente, no, también hablo de todas las “repetidoras” ideológicas que hacen eco y aplauden la retórica presidencial.

 

Como buen político –tradicional-, López Obrador se apropia cada mañana de ese papel para decir como esto, como aquello, etc. sin embargo, como buen político –muy tradicional- incumple su palabra, porque una cosa es decir y ofrecer y otra cumplir, aunque cabe hacer la aclaración qué una cosa es cumplir lo que se dice en campaña para los votantes y otra cumplir con lo ofrecido a los amigos, familiares y uno que otro conocido que te ofrezca apoyo electoral –no incondicional-.

 

Desde luego que el cumplimiento de lo ofrecido –para no caer en la mentira- debería ir acompañado de una nota aclaratoria que categóricamente se apoyara en un “siempre y cuando”, ahí nada más para que nadie se sintiera engañado o para no tener que contratar “paleros” para “interpretar” a modo los dichos y las acciones del Presidente.

 

Politizar lo que se ofreció “no politizar” es una de esas tantas cosas que no se han cumplido, o  al menos no está claro bajo que condiciones el Presidente no ha podido cumplir por culpa de todos esos críticos que nada más andan esperando que el Jefe del Ejecutivo se resbale para culparlo por todo el cochinero con el que tiene que lidiar –el heredado y el que ha propiciado-.

 

Y como lo señalé al principio, lo que sobran son pretextos, sin embargo, lo que sobra es inventiva, de esa inventiva que no deja de sorprender y que además permea como se “barren las escaleras”, “de arriba para abajo”. Así se han politizado aspectos como el abasto de medicamentos, el reclamo de justicia y seguridad, el reclamo de medidas económicas más eficientes frente a la crisis, la pandemia de COVID-19 y ahora hasta las tradiciones. Eso de colocar una gran ofrenda en Palacio Nacional y hacerse una limpia en medio del Luto Nacional de tres días en homenaje a los caídos por la pandemia como parte del afán propagandístico y muy populista de la 4T, dejan ver la posibilidad de que en un futuro no muy lejano, cuando llegue la vacuna para el COVID-19 se declaren tres días de fiesta nacional, se sacrifiquen animales, y se proponga el día para que “el pueblo le agradezca al soberano Presidente” lo que constitucionalmente está obligado a atender, es decir, la salud del país. Graciosa y lambisconamente algunos dirán que López salvó al país.

 

#InPerfecto