#InPerfecciones
Un presidente tan pequeño que debe recurrir al discurso de “Estás conmigo o en mi contra”
Cruz Hernández Sánchez / @IamMillennial_
cruzhendez@gmail.com
Un presidente tan pequeño que debe recurrir al discurso de “Estás conmigo o en mi contra”
Es curioso cómo se implementa una transformación desde la perspectiva de López, no se le da un enfoque hacia el progreso o el bienestar, se trata de una transformación hacia el pasado hacia las viejas prácticas que se supone se deben de erradicar, hacia una realidad en la cual únicamente la palabra de López tienen peso. Desde su eterna campaña presidencial únicamente se ha dedicado a dividir a México y limitar el progreso de una manera abismal, no se tiene un plan y al momento de cuestionarlo se recurre a la ya gastada excusa de que sus adversarios lo atacan, a pesar de ser presidente, todavía no puede dejar de ser candidato.
Desde minimizar los problemas actuales hasta contradecir cifras oficiales, López no entiende que los discursos de sus mañaneras tienen peso en una sociedad que busca respuestas y unidad. No tiene un plan preparado y únicamente sale a decir o que él cree que el pueblo quiere escuchar, todas sus mañaneras son un reflejo claro de su gobierno, un espectáculo improvisado en el cual se trabaja sobre la marcha, sin un plan, sin un rumbo.
Se han normalizado los discursos de odio llegando al extremo de establecer bandos, “O estás a favor de la 4t o en contra” no se está dejando espacio a la crítica o a los matices que pueden existir dentro de las opiniones políticas, está recurriendo a pleitos infantiles con gobernantes para reafirmar su autoridad.
La metamorfosis que ha sufrido la moral de López durante el proceso de ser candidato presidencial a “presidente” es bastante notoria, antes predicaba soluciones y ahora exclama excusas. Antes el gobierno era responsable de los problemas que enfrentan los mexicanos, ahora el gobierno es una víctima del pasado. Contradicciones, excusas y culpas, es lo que hemos escuchado a casi un año del inicio de una mal llamada transformación; Por un lado grita a los cuatro vientos que los índices de violencia van a la baja, algo difícil de notar cuando a diario se derrama sangre por todo el país, se dirige al pueblo pregonando que ayudará a los pueblos indígenas, pero se les asigna un presupuesto menor para sus necesidades, ahora ya no son gasolinazos, son ajustes inflacionarios, ya no hay nepotismo, ahora los familiares de personajes con cargos públicos cumplen en su totalidad con el perfil para ser integrados y lo más preocupante de todo, una ampliación de mandato pasó de ser algo inadmisible a un acto totalmente constitucional.
