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La Sedena reveló el nombre del cachorro que fue donado por el gobierno de Turquía, tras el fallecimiento de “Proteo” en las labores de rescate del terremoto ocurrido en febrero.
Con Información de EL UNIVERSAL
Este miércoles, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) reveló el nombre del cachorro que fue donado por el gobierno de Turquía, tras el fallecimiento de “Proteo” en las labores de rescate del terremoto ocurrido en febrero.
Como una muestra de solidaridad y empatía, Ilham Kemal Tu?, embajador de Turquía en México, hizo la entrega oficial del can al Ejército Mexicano.
El instructor del canino de raza pastor alemán será Carlos Villeda Márquez, quien también fue el entrenador de Proteo y estará a cargo de su cuidado.
Su nombre es Arkadas y tiene apenas tres meses de edad. De acuerdo con la información proporcionada por la Sedena, el perro nació el pasado 5 de enero en Turquía.
A través de Twitter, la Sedena envió un mensaje en agradecimiento a su llegada:
“Hola ¡Soy Arkadas y quiero que me conozcas! ¡Gracias a mis amigos de México quienes me recibieron con mucho cariño, prometo dar lo mejor para ser un gran perro de búsqueda y rescate!”, escribieron.
Pero ¿por qué se eligió dicho nombre para el binomio canino? Arkadas significa “amigo”, “camarada” o “compañero” conforme al uso de habla cotidiana y su pronunciación fonética corresponde a arkadash.
Otro de los nombres turcos que se tenía contemplado para el lomito era “Yardim”, que significa “ayuda” en turco.
Luego de darse a conocer la noticia, el cachorro fue recibido con los brazos abiertos con mensajes como: “Arkadas ya eres mexicano, ojalá te cuiden mucho para salvar muchas vidas”, “Bienvenido a su nuevo hogar”, “Los perros deberían ser eternos”.
Los perros pastor alemán tienen un temperamento dócil, lo cual los compañeros leales y de buen carácter. A diferencia de otras razas, son fáciles de entrenar, por lo que es común que sean utilizados como canes de la policía, de servicio, agilidad, obediencia y centinelas.
Como indica su nombre, son originarios de Alemania y se desarrollaron a finales del siglo XIX mediante la cruza de varias razas de perros para pastoreo. Su propia anatomía les permite desarrollar tareas de rescate y con los cuidados adecuados llegan a vivir entre 9 a 13 años.
Para que un can pueda ser rescatista debe reunir las siguientes características: ágiles, energéticos, de alta resistencia, excelente condición física, con carácter inteligente y actitud sociable con personas y otros animales.