#Sexualidad
¿Y hay algo de malo en seguir teniendo de contacto o amistad a quien fue mi pareja, si ya tengo una nueva relación?
Dr. Juan Manuel Carvajal Blancas
Juanmanuel.carvajal@inperfecto.com.mx
“Si vas a mudarte a una nueva casa, asegúrate que el antiguo dueño no siga teniendo las llaves. Y no, no estoy hablando de casas”.
Circula este texto en redes sociales, que ha desatado polémica, haciendo una metáfora acerca del contacto con las “exparejas”, cuando ya estás en otra relación.
Al respecto, con frecuencia en las sesiones de terapia me preguntan:
¿y hay algo de malo en seguir teniendo de contacto o amistad a quien fue mi pareja, si ya tengo una nueva relación?
La respuesta es sencilla: lo que acuerdes con tu pareja en tu nueva relación y mejor aún si es recíproco. Es decir: si sigues manteniendo amistad con tu ex pareja y defiendes esa postura, el acuerdo equitativo, justo, será aceptar que tu pareja también lo viva así con quienes se compartió.
Sin embargo, si no estás en una postura a lo “open mind” y la presencia de la expareja te incomoda, es preferible tomar acuerdos para ambos cerrar las puertas y poner límites necesarios, con quienes se compartieron en el pasado, privilegiando así tu nueva relación.
¿Y si mi ex y yo tenemos hijos en común? Al menos que otro acuerdo tome la nueva pareja, la relación con el(la) ex, es con los hijos, acerca de los hijos y de la puerta hacia afuera.
Personas entrometidas que quieren seguir visitando la casa, con el pretexto de tener hijos en común, o que el aprecio, la gratitud o los buenos recuerdos, ponen en riesgo la estabilidad de la nueva relación, cuando no se procuran los límites
“¿Se puede tener una sana amistad con quien fue mi pareja e incluso, que tenga amistad con quien ahora está conmigo?”
¡Claro que sí! Siempre y cuando hayan pasado por un proceso de limpieza emocional, sexual y de relación que les permita mirarse desde otro lugar y eso se logra con tiempo necesario de psicoterapia y la disposición mutua de flexibilizar sus sistemas de creencias. Pero atención, también están aquellas personas que, con base a su sistema de creencias o su condición territorial, no pueden o no quieren, y también es completamente comprensible, digno de respeto.
Mi sugerencia siempre es: si a uno de los dos miembros le genera malestar o incomodidad la presencia cercana de la expareja, con eso es suficiente para cerrar puertas y poner límites, pues pones en riesgo tu nueva relación. Y si sabiendo de la molestia que le genera, pretendes que tu pareja actual acepte a tu ex como tu amistad, prepárate para las intensas batallas que se avecinan y que, con mucha probabilidad lastimarán tu nueva relación.
Al respecto, si a tu pareja le has expresado lo que te incomoda o molesta del contacto con quien se compartió y claramente se niega a poner límites y distancia, requiero decirte que es a ti, a quien le corresponde tomar decisiones. ¿Puedes quedarte en esa condición y convivir con esa parte que, aunque te desagrada, logras aceptarla? De lo contrario podrás considerar, entonces, la conveniencia entre quedarte o retirarte, antes que vivir en la neurosis o en el sufrimiento constante.
Revisa donde están ahora tus prioridades y si dificultades tienes para tomar decisiones, acude con un experto en psicoterapia para apoyarte.
Dr. Juan Manuel Carvajal Blancas
Doctor en psicología y
Psicoterapeuta Humanista
Contacto: 951 226 29 13