#InPerfecciones
Ante el cambio climático lo que más destaca de nosotros es la indiferencia.
Rodrigo Dávila / @romdv16
rodrigo.davila@inperfecto.com.mx
Que tal, amigos de inPerfecto, como siempre para mi es un enorme placer poder llegar a ustedes el día de hoy viernes 23 de abril del presente 2021, como ya he dejado en claro en anteriores columnas e intentado ser muy crítico ante ciertas problemáticas sociales aunque por momentos con cierta carga ideológica, la cual es poco relevante para las siguientes lineas escritas de esta semana.
Como sabrán, ayer fue el día de la tierra, día que para la mayoría de los mexicanos pasó sin pena ni gloria; mucho se ha hablado del cambio climático, desde finales de los noventas observaba los programas que ya nos advertían sobre este problema mayúsculo que deja de lado sin duda alguna cualquier cuestión ideológica o política, con el paso de los años las circunstancias han ido empeorando debido a nuestra poca memoria y el ritmo de vida consumista al cual nos encontramos atados; hoy solamente nos quedan nueve años para revertir por completo nuestro modus vivendi si queremos evitar el cataclismo humano. Recuerdo haber visto hace poco un documental que nos hablaba del reto enorme por revertir el cambio climático en diez años y las visiones son completamente desalentadoras, la comunidad científica cada vez más se esta convenciendo por investigar y desarrollar lo que llaman geo – ingeniería, cómo último recurso por si no logramos cumplir nuestra meta, el único problema es que de fallar las consecuencias serían igual de catastróficas que el cambio climático, nos encontramos en lo que seria un ley de herodes a nivel planetario ¿Te haz preguntado cómo será tu muerte ocasionada por el cambio climático? Hablando por supuesto de que hayas sobrevivido a los desastres naturales, al descontrol de una sociedad envuelta en el pánico, las guerras entre naciones por los recursos cada vez más escasos etc, tu muerte será siendo asado como un filete por las altas temperaturas y el efecto invernadero. Pareciera que el covid nos dio un respiro muy leve ante tal panorama pero no es suficiente, no hemos cambiado nuestros hábitos y mucho menos se ejecutan las leyes respecto al medio ambiente, continuamos contaminando, continuamos comportándonos como seres eternos, llenos de vanidad.
Nuestros gobiernos y nosotros mismos hemos fracasado ante el problema, lo vimos reflejado en el desinterés del día de la tierra, lo vemos reflejado en campañas electorales vaciás en su mayoría, hablando por todos los partidos políticos, antes en las campañas veíamos los kilos y kilos de basura de papel o platico por la propaganda barata, ahora contaminan auditivamente con sus bocinas y una canción de mal gusto; contenido vació y contaminante, parece broma pero dentro del surrealismo mexicano decimos que nos preocupamos por el medio ambiente y vemos al “ciudadano” promedio tirando su bolsa de plástico en plena fila de la parada del autobús comportándose como un simio inconsciente, lo vemos en las decisiones gubernamentales de cancelar un aeropuerto por razones ambientales pero por otra parte impulsa un ecocidio al sureste del país, una refinería en tiempos donde el petroleo cada vez es más obsoleto, donde el mundo y sus naciones avanzan de una u otra forma en materia climática.
Ayer camino a casa, vi a un sujeto tirando sus latas de cerveza en el camión y al encararlo su reacción fue tan patética y decadente, en pocas palabras el sujeto me dijo… no te metas en mi vida, carnal tú lo estas haciendo con la mía y con la de los que te rodean, lo triste de esto es que veo sujetos así día con
día, no avanzamos como sociedad en materia climática, pareciera que estamos enfermos de mucha anomia en muchas versiones pero eso ya será otro tema del que sería interesante hablar. No olvides dejar tu comentario, compartir y dar manita arriba si compartes un poco mi forma de pensar.