#InPerfecciones
A pesar de que el mundo está pasando una situación convulsa e inusual, el futbol sigue dando golpes de autoridad, en esta ocasión grandes astros del balompié cambiaron de equipo y las repercusiones son notorias.
Jorge García Vielma
jorge.garcia@inperfecto.com.mx
Hubo momentos donde las actividades deportivas estuvieron condicionadas a causa de la pandemia por COVID-19, inclusive algunas siguen en restricción total y otras tantas fueron puestas en marcha de manera anormal, por ejemplo los Juegos Olímpicos y Paralímpicos Tokio 2020; los cuáles han tenido lugar hasta este año. Ceder, y hasta resignarse, es el camino por el que se ha optado en este último año y medio, las proyecciones más positivas oscilaban que el aislamiento social pronto se convertiría en un recuerdo y la normalidad imperaría nuevamente, falsas ilusiones. Ahora la alternativa simplemente es adaptarse; y el futbol ha sabido mover bien sus fichas para no perder terreno y posicionarse de nueva cuenta a nivel mundial.
El continente europeo se ha vuelto el epicentro del futbol, son estas tierras donde la apertura a los estadios volvió a suceder y parece ser que de a poco el espectáculo deportivo recupera lo que fue perdiendo por el virus sars cov 2, ¿todos los caminos llevan a Europa? El deseo del aficionado al futbol en América Latina es volver a los estadios y vivir con extrema pasión todos los encuentros, tal y como sucede del otro lado del charco pero por ahora parece ser una misión casi imposible o suicida. La gente se ha dado a la tarea de abarrotar los estadios en el viejo continente, verlos alentar y hondear banderas se han convertido en imágenes habituales a pesar de que aún no se puede cantar victoria sobre la pandemia, aunque comenzar con estas actividades parece ser una buena señal para ir arrancando.
La mayoría de los discursos, de cualquier ámbito, coinciden en que la situación actual ha puesto en jaque a todos los sectores sociales, siendo el de la economía uno de los mayores afectados. Resulta lógico que emerjan crisis financieras, tanto a nivel micro como macro; pero a pesar de dicho panorama la industria del futbol, aunque también se detuvo por un momento, sigue siendo una máquina que funciona a la perfección y genera resultados favorables para los dueños del balón. La última semana hubo un hombre que volvió a llevarse los reflectores: Cristiano Ronaldo, el lusitano cambió de equipo, atrás dejó Turín para volverse enfilar hacia Manchester, ¿qué hay de novedoso en una transferencia futbolera? Bastante, no todos los días uno de los mejores jugadores de la historia del balompié cambia de equipo para regresar al club donde se presentó ante el mundo, y tal parece que igualmente Old Trafford será el lugar para ver sus últimas puestas en escena; pero bueno, podría pensarse que esto solo alcanza a los hinchas a este deporte, pero no es así.
¿Dónde surgieron los rumores y noticias sobre la venta de CR7 al United? En las benditas redes sociales, y no es un hecho menor por más que esté normalizado. Hubo de todo, esta noticia comenzó con las ya clásicas fake news, se decía que el jugador lusitano arribaría a Manchester pero al equipo dirigido por Pep Guardiola, tal premisa resultó ser falsa a pesar de que había medios de comunicación que la afirmaban; lo anterior demuestra que no se puede confiar a ciegas en todo lo que se publica en internet. Por otro lado una vez oficializada la llegada del capitán de la selección portuguesa a los red devils la afición inglesa y de todo el mundo comenzó a reaccionar, las interacciones en las redes sociales fueron subiendo como espuma, ¿por qué una noticia como éstas cuenta con millones de likes? Una imagen subida a la cuenta oficial de Instagram del Manchester United rompió todos los récords hasta ahora existentes, los usuarios demostraron su asombro ante un hecho extraordinario, también se observó el valor y peso con el que cuenta el Deporte. Hay frases que se leyeron y escucharon bastante en la última semana, pero una de las que más destacó fue: “volvió a casa”; ¿sentido de pertenencia? Claramente lo hay, tanto para el hincha que siente propio al jugador, pero igual aplica para CR7 porque deja ver que no es una máquina diseñada solo para ganar sino que también tiene sentimientos, transmite felicidad al saber que volverá a jugar en suelo británico; efectos de lugar como señala Pierre Bourdieu.
Por último, pero no menos importante, se encuentra la parte económica. De inmediato comenzaron a salir notas que hablaban de las cifras que se pagaron por el fichaje y también del nuevo sueldo de Cristiano Ronaldo, ¿esta información realmente es útil? El lector promedio fácilmente comienza a fantasear e imaginar lo diferente que sería su vida si tan solo tuviera una pequeña parte de todo lo que ganará el nuevo jugador del United; meras especulaciones e ilusiones. Al tener en perspectiva dichas cantidades también se ve que a pesar del COVID-19 las cosas no cambiaron mucho, podría pensarse que se hablaría de menos dinero pero sucede lo contrario, todo va a la alza; también es cuestionable que la industria del futbol gaste a manos llenas cuando hay campos sociales que ameritan de manera prioritaria los recursos, y más por la situación que actualmente se vive. Se vale gozar y deleitarse con lo que ocurre sobre la grama, y más si lo hace El Comandante, pero tampoco está prohibido cuestionarse que existe detrás de ver un balón en las redes.
Rueda el balón, rueda la vida.