Editorial

No eres negativo, solo estás mal programado.

#InPerfecciones
Estamos programados, como si fuéramos robots, para el autosabotaje. 

 

 

Georgina Valez / @gini_friski
gvt3377@outlook.es

 

La mente humana es uno de los “lugares” más hermosos y misteriosos que existen. Está llena de pensamientos que como ya sabemos, o al menos yo, gracias a películas fáciles de entender como intensamente, que son dinámicos y pasajeros. Aunque también existen otros que se quedan estáticos, adheridos a nosotros, se van muy lentamente o ni eso, por lo que hacen que todo a nuestro alrededor nos pese, hace que nos percibamos a nosotros mismos como una persona negativa y pesimista, pero es normal y necesitamos, de hecho, de ellos. 

Me acabo de enterar de que esa situación en la que te repites una y otra vez que todo va a estar mal o que todo el universo está conspirando en tu contra se llama rumiación mental, no es una enfermedad, pero sí necesita un tipo de tratamiento que consiste básicamente en registrar tus pensamientos y cuestionártelos a ti mismo, ya que está compuesta de pensamientos automáticos negativos que se producen con mayor intensidad si te encuentras abrumado o deprimido. Aunque no necesariamente tienes que estar en un estado vulnerable, pero no es ningún secreto que bajo estas condiciones nuestros pensamientos a veces ni siquiera son claros, pero sí muy desagradables y nos conducen, si no los enfrentamos, a una etapa de autosabotaje que solo uno mismo puede terminar. Lo que nos lleva a este fenómeno de la psicología es que estos pensamientos son repetitivos, a nivel de que los abrazamos y aceptamos, aunque nos lastimen, como creencias. Por eso llegan a regir cierta parte de nuestra vida, si te repites todos los días mínimo una vez que todo está mal, que el mundo conspira en tu contra, que no vales nada, que la vida no vale la pena y demás, claro que te lo vas a creer, además de que soy fiel creyente de que el entorno en el que vivimos no ayuda para nada y eso fue lo que nos programó a lo largo del tiempo de esta manera, en nuestra rutina diaria nos vamos encontrando con situaciones que reafirman nuestra negatividad y así ha sido y será siempre, pero la idea es ser más inteligentes, o si lo queremos creer, más fuertes emocionalmente, hasta podemos tomarlo como un reto (porque lo es) y ganarle de alguna manera a la mente porque sí estamos en una lucha constante con ella. Cuesta creer que algo intangible tenga tanto poder, pero es así, y al final, solo hace falta reprogramarnos. Todos los días. 

#InPerfecto