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El ser humano a lo largo de su historia siempre han tenido una gran inventiva y una gran iniciativa, sin embargo, existen descubrimientos los cuales no solo cambiaron la forma de pensar, si no todo la historia.
Marto GoAg / @MartoGoAg
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Los seres humanos han tenido una historia sumamente larga, aunque somos una especie reciente a comparación de la edad que tiene el planeta Tierra, sin embargo, el avance que se ha logrado con la humanidad es sumamente grande, pero algo que debemos hacer énfasis es que el humano no sabe ni nunca sabrá todo, por eso mismo hay descubrimientos los cuales han cambiado la historia del mundo por completo.
Uno de los primeros descubrimientos que han existido es el uso de la piedra como herramienta y arma, lo cual marco una gran diferencia entre los humanos y el resto de los animales, ya que es cierto que los humanos no tenían una gran ventaja frente a otras especies con garras, con un cuerpo mas atlético y ágil.
Gracias a estas herramientas de piedra los ancestros del hombre moderno, consumieron carne y la médula ósea de grandes mamíferos, lo cual no solo ayudo al ser humano a conseguir una fuente proteica, mas bien, la inclusión de la carne en la dieta humana, jugó un papel sumamente importante en el desarrollo del cerebro.
Gracias a las investigaciones realizadas por la Universidad de Harvard, comprobó que la carne y el fuego fueron esenciales para la evolución humana dando un paso al camino evolutivo a las características del homo erectus.
En la antigüedad, nuestros ancestros consumieron la carne sin el uso del fuego, pero fue con el ahorro en la masticación que redujo el tamaño de la mandíbula, los músculos y los dientes, cambiando en gran medida los rasgos tan marcados de los ancestros del humano, y permitió una transformación en el cerebro.
Con el uso del fuego, existió una reducción masiva de los dientes y músculos de la mandíbula, se achicaron los intestinos y se expandió el cerebro.
Podríamos decir que gracias a la piedra como herramienta, la carne y el fuego el humano comenzó su cadena evolutiva, llegando al Homo Erectus, y desde este momento, el hombre no se detuvo y fue gracias a más descubrimientos como la rueda y el arado lo que permitió que el humano pudiera distinguir.
