#InPerfecciones
Lo bueno de leer nuestras editoriales es que parece que vemos el futuro.
Miguel Angel Millán Cancino
miangel.millan@inperfecto.com.mx
¿Dónde está el presidente Constitucional?
Dando entrevistas y jugando sus dados de una manera un poco sorprendente, ¿porqué?, porque como lo anticipó #InPerfecto, parece que ya va a salir Javier Duarte de la cárcel para enfrentar sus procesos en libertad, quizá con alguna medida domiciliaria para que no se escape como ya lo hizo, pero los juegos de la política interna de México están jugando de una manera abstracta, sucia, manipulada y sobre todo corrupta.
Hace unos días la periodista de Televisa Denisse Maerker, entrevistó a Peña Nieto, entiendo que tiene tiempo para eso y más, ya que ha dejado que Andrés Manuel López Obrador sea el que trabaje y EPN opere para favorecer a sus amigos o a los aliados que le ayudaron a demostrar fallidamente que el Estado comandado por el actual titular del Ejecutivo era un gobierno limpio y honesto, que claramente ahora muestra que nunca fue, eso por si alguien pensaba que lo era. Regresando al tema de la entrevista que dio, la periodista le pregunto que si menosprecio el tema de la corrupción o si lo desdeño, situación que claramente le molestó al todavía primer mandatario, poniéndose rojo y cambiando el tono de su respuesta para responder con tajante voz que no, que nunca menosprecio el tema, no lo desdeño y claro que no lo hizo, como podría él desdeñar algo que tiene tatuado en la sangre, algo que es lo que justamente representa.
El tema de la corrupción es uno de los temas de la agenda política pública más sonados, sobre todo más manipulados a favor o en contra de alguien, pero, ¿cómo hoy no pondríamos en la balanza el combate a la corrupción si los que Peña dijo eran la cara del nuevo PRI son perseguidos políticos por corruptos?
Tenemos a un presidente no solo perdido y desdeñado, quizá inservible ya, tenemos a un presidente que quiere dejar un Estado donde no se localicen los negocios sucios dados con personajes como Duarte, Gordillo, Medina y todos los que se sumen, porque obviamente durante el mandato de Peña Nieto ellos tenían que estar callados, pero no estando él quien podría mantenerlos callados para que la cacería de brujas se diera, tiene que lograr el agradecimiento de sus perseguidos y poder ejecutar el plan maestro, el regreso del PRI a los Pinos a toda costa, la pregunta es ¿cómo lo harán?.
Los pasos del priismo siempre son desconfiables, sobre todo viniendo de aquellos asesinos del 68, del fraude del 88 o de que no tengamos un salario mínimo digno, porque eso es lo que representa ese partido que tiene a mal los colores de la bandera mexicana que a corazón de quien escribe esta editorial, México no es un escudo lleno de sangre y de dinero sucio como lo es ese partido que ha dejado a este país adolorido mucho más de una vez.
El partido causante de Aguas Blancas, de la aparición del EZLN, de la pobreza en México, del rezago educativo, de las instituciones fallidas y de la alta burocracia hoy juega un papel secundario, donde le dejan todo el protagonismo a alguien que va a tomar el control del país y parece haber aceptado el guión para abrir los canales de la libertad de los que han lastimado a muchos en el país, que les han dejado sin comer, sin trabajo, que han matado periodistas. Eso es lo que significa la posible salida de Duarte y eso es lo que pueden hacer siendo de bajo perfil, porque todo mundo se enfoca en los aciertos o errores del próximo mandatario y nadie ve lo que se está haciendo desde las filas de las instituciones que siguen bajo la cintilla de castigo de aquellos que ¿perderán el poder?
Y, si es que realmente pierden el poder y nada está pactado, ¿a quién perseguirán ahora los que quieren venganza gozando de la libertad sin culpas?
Parece que el mesías que perdonaba a los malos no era AMLO, sino que duerme en Los Pinos con una actriz de Televisa que diariamente le da clases que seguro habrá tomado de Stanislavzky, filósofo teatral que le dio a la actuación un toque de vivencial a la conducta humana, por eso, a veces algunos incautos le pudieron creer a EPN el cinismo de sus traiciones.
#InPerfecto