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La Asamblea de Ecuador rechazó el jueves un pedido de la oposición para enjuiciar políticamente a la canciller Gabriela Sommerfeld.
AP
La Asamblea de Ecuador rechazó el jueves un pedido de la oposición para enjuiciar políticamente a la canciller Gabriela Sommerfeld, a la que responsabiliza por la incursión policial a la embajada de México en Quito para arrestar al exvicepresidente Jorge Glas, acusado de corrupción.
Con 76 votos de los 128 asambleístas presentes se aprobó la moción de archivo planteada por el legislador César Umajinga, quien aseguró que “este juicio no se trata de una ministra, se trata de la defensa del Estado y de la soberanía nacional”.
Umajinga recordó que Ecuador está siendo demandado por México en la Corte Internacional de Justicia de La Haya y defendió la actuación del gobierno al incursionar en la sede diplomática mexicana para arrestar a Glas, refugiado en esas instalaciones desde diciembre, a quien describió como “un prófugo que estaba sentenciado” por corrupción.
El juicio político fue impulsado por Revolución Ciudadana, partido liderado por el expresidente Rafael Correa (2007-2017), que acusó a Sommerfeld de incumplir sus funciones por haber “sacrificado el prestigio internacional de la nación” al haber permitido la irrupción de efectivos policiales en esa embajada el 5 de abril para capturar a Glas, a quién México le había concedido el asilo poco antes.
El presidente de la Asamblea, Henry Kronfle, había advertido la semana pasada que sería peligroso sancionar a la canciller Sommerfeld mediante un juicio político en el Legislativo porque ello “debilitaría” la posición de Ecuador en el juicio que planteó México en La Haya.
Tras la irrupción —que fue severamente cuestionada por varios países— México rompió relaciones con Ecuador y lo denunció ante la Corte Internacional de Justicia. El gobierno ecuatoriano contrademandó aduciendo que ese país dio protección a una persona sentenciada y requerida por la justicia lo que, sostuvo, también viola tratados internacionales.
Recientemente México solicitó a Ecuador que le conceda un salvoconducto a Glas para que pueda ser excarcelado y trasladado a un tercer país. El pedido fue negado por la cancillería ecuatoriana.
Glas, vicepresidente de los gobiernos de Correa (2013-2017) y de Lenín Moreno (2017-2018) afronta dos penas de prisión por corrupción y ha sido citado por los tribunales por una nueva acusación de supuesta malversación de fondos.
El exvicepresidente está detenido en una cárcel de máxima seguridad de Guayaquil, adonde fue llevado poco después de ser detenido en la embajada mexicana en Quito.
