Nacional

Indígenas tzotziles denuncian violencia criminal y exigen ayuda al Gobierno mexicano

#Nacional
Indígenas tzotziles de Chenalhó, en el estado de Chiapas, realizaron este lunes un pronunciamiento público tras un ataque.

 

 

EFE

Indígenas tzotziles de Chenalhó, en el estado de Chiapas, sureste mexicano, realizaron este lunes un pronunciamiento público tras un ataque armado que sucedió el 21 de febrero y duró más de seis horas, en el que quedaron en medio del fuego cruzado protagonizado por sicarios del crimen organizado, lacra que azota a la región.

Unas 55 Mujeres y niños indígenas maya tzotziles, víctimas de desplazamiento forzado interno, se manifestaron y exigieron a las autoridades paz y justicia en la localidad de Polhó, municipio de Chenalhó.

“Estamos a unos meses de cumplir dos años de desplazamiento forzado, durante este tiempo hemos estado en peligro en dos ocasiones, hemos quedado en medio de los enfrentamientos y vivimos la ejecución de nuestros familiares y nosotros sobrevivimos”, expresó a EFE Manuel Gómez Vázquez, representante de los desplazados de Santa Martha.

Denunciaron que la violencia en sus comunidad se ha recrudecido debido al olvido y la falta de atención de las autoridades mexicanas y recordaron la agresión que sufrieron los habitantes de Polhó el pasado 21 de febrero, por parte de un grupo armado, cuando 68 familias víctimas de desplazamiento forzado quedaron atrapadas entre el fuego cruzado.

Explicaron que ese enfrentamiento, que duró más de seis horas bajo fuego intenso, se pudo conocer hasta este lunes debido a que durante dos semanas hubo fuertes amenazas a la localidad por parte de grupos del crimen organizado.

Aquel día los disparos comenzaron en la madrugada, mientras dormían los mas de 2.000 habitantes, quienes fueron atacados por sicarios, que se ubicaron en los límites de la comunidad Majomut, para que desde ahí abrir fuego contra de los pobladores.

Así lo relató a EFE Diana Ruiz, habitante de Polhó: “Quienes nos dispararon estaban en ese cerro del banco de arena, eran como 100 personas, eran sicarios uno cayó muerto traía identificación de Veracruz, lo confirmó la Fiscalía”.

Las mujeres tzotziles exigieron una atención inmediata por parte del Gobierno de México y del estado de Chiapas que, dijeron, no han cumplido con la atención a la salud, educación, viviendas dignas y seguras, y dijeron de continuar así temen que se repita la masacre de Acteal, donde más de 45 personas perdieron la vida.

El 22 de diciembre de 1997 un grupo de indígenas que oraba en la comunidad de Acteal fue atacado por presuntos paramilitares, también indígenas, que acabaron con la vida de 45 tzotziles de la comunidad de Las Abejas -21 mujeres, 4 de ellas embarazadas, 15 niños y 9 ancianos.

Los manifestantes, plantados en la carretera en compañía de sus hijos, portaban mantas con las frases “Paz y Justicia”, “Exigimos Justicia, “Cárcel para los asesinos”, “Alto a las Violaciones de los Derechos Humanos”, además de “No más desplazamientos” y “No más ataques armados”.

La violencia se ha agudizado en Chiapas por el estallido de los conflictos político-sociales de las comunidades indígenas y donde además, el crimen organizado ha comenzado a incursionar en esta zona de los Altos de Chiapas.

Activistas, defensores de derechos humanos y comunidades de las diferentes etnias, manifestaron el clima de “guerra civil” que se vive en el estado por los conflictos armados, la presencia de grupos del crimen organizado y cárteles del narcotráfico, lo que ha desencadenado homicidios, desapariciones y desplazamientos forzados, en particular en la Sierra y comunidades indígenas afines al Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).