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La junta de gobierno del banco central mexicano dijo que, en sus siguientes reuniones, evaluará la posibilidad de ajustar la tasa de referencia, que se ubica en máximos históricos.
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La junta de gobierno del banco central mexicano dijo que, en sus siguientes reuniones, evaluará la posibilidad de ajustar la tasa de referencia, que se ubica en máximos históricos, a pesar de reconocer que el panorama inflacionario sigue implicando “retos”, según la minuta de su última reunión publicada el jueves.
Más temprano, datos oficiales mostraron que la inflación se moderó más de lo esperado en la primera quincena de febrero luego de haberse acelerado en los últimos tres meses. Además, la segunda mayor economía de América Latina ralentizó su ritmo de crecimiento a fines del año pasado.
La próxima decisión de Banxico, como se le conoce al banco central mexicano, está pautada para el 21 de marzo, tres años después de la última reducción de tasa clave. A principios de mes, la entidad monetaria mantuvo su tasa de referencia en el máximo histórico del 11.25%.
“La Junta de Gobierno (…) en las siguientes reuniones evaluará, en función de la información disponible, la posibilidad de ajustar la tasa de referencia”, dijo la minuta.
“Tomará en cuenta el progreso en el panorama inflacionario y los retos que aún prevalecen. Considerará la incidencia de la postura monetaria restrictiva que se ha mantenido y la que siga imperando sobre la evolución de la inflación a lo largo del horizonte en el que opera la política monetaria”, agregó.
La mayoría de la Junta de Gobierno de Banxico sigue anticipando que la inflación general converja a la meta del 3% en el segundo trimestre de 2025 y que el balance de riesgos para los precios se mantiene “sesgado al alza”, en parte, por una persistencia del componente subyacente en nivele elevados.
