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Cuajimalpa ofrece diversas herramientas y recursos para ayudar a las mujeres en situaciones de violencia de género.
Redacción InPerfecto / @InPerfectoMx
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- Ante casi 4 mil personas Olimpia Coral, activista mexicana, impartió una conferencia.
- Cuajimalpa ofrece diversas herramientas y recursos para ayudar a las mujeres en situaciones de violencia de género.
Como parte de la acciones que se han implementado a favor de la mujer, la alcaldía Cuajimalpa de Morelos llevó a cabo ante casi 4 mil personas una conferencia impartida por Olimpia Coral, activista mexicana, quien compartió su experiencia y conocimientos sobre la Ley Olimpia, con el objetivo de brindar apoyo a las mujeres de la demarcación en diferentes áreas, promoviendo su bienestar y seguridad para concientizarlas de que no están solas y que pueden salir adelante.
Es importante señalar que en Cuajimalpa promovemos este tipo de acciones, a través de diversas herramientas y recursos para ayudar a las mujeres que se encuentren en alguna situación de violencia de género.
Se cuenta con la casa de la Mujer y Emergencia, se tiene una bolsa de empleo, cuentan con asesoría psicológica y legal para ellas y sus hijos. Cabe señalar que si los hijos son pequeños se les da el apoyo para que puedan iniciar sus estudios dentro de uno de los CENDIS que hay en la alcaldía.
En Cuajimalpa, las mujeres son primero, por lo que bajo el programa de “Acompañamiento a la Mujer” se garantiza su seguridad e integridad ofreciéndole apoyo para ayudarla a regresar con bien a casa, si es que se encuentra en su trabajo, establecimiento, centro comercial u otro lugar donde se sienta insegura.
Olimpia Coral Melo, la joven que dio nombre a la ley contra el acoso digital en México aseguró que el feminismo le salvó la vida, luego de tres intentos de suicidio por haber sufrido violencia cibernética, por parte de su expareja quien divulgó un video sexual de ella sin su consentimiento, aunque ella intentó denunciarlo, solamente encontró puertas cerradas por parte de las autoridades de Huauchinango, Puebla, por lo que se dio a la tarea de iniciar una lucha que duraría siete años para crear y promover una ley que penalizara estas prácticas y que hoy es una realidad.
