#Qatar2022
El 20 de noviembre, la máxima cita del fútbol finalmente se pondrá en marcha un par de horas después de la puesta del sol en el estadio Al Bayt.
Con información de AP
La primera Copa del Mundo en Medio Oriente finalmente será inaugurada dentro de un mes en Qatar y pondrá fin a un turbulento ciclo de 12 años que ha transformado la nación.
Qatar ha sido cuestionada sobre cómo logró persuadir a la FIFA para darle la sede en 2010; criticada por el trato recibido por los trabajadores migrantes contratados para la construcción de los estadios y demás infraestructura del torneo; y blanco de las mofas del mundo del fútbol tras tener que cambiar las fechas tradicionales de junio y julio para jugar en noviembre y diciembre.
La pequeña nación árabe que prospera en el Golfo Pérsico ha superado todo eso, al igual que la hostilidad de los estados vecinos que impusieron un boicot económico y diplomático de tres años que culminó en enero de 2021.
El 20 de noviembre, la máxima cita del fútbol finalmente se pondrá en marcha un par de horas después de la puesta del sol en el estadio Al Bayt, con capacidad para 60.000 aficionados, un nuevo escenario situado al norte de Doha que fue construido expresamente para el Mundial. El selección anfitrión, con su uniforme de color granate, abrirá el certamen contra Ecuador.
Cada uno de los 64 partidos que involucrarán a 32 equipos durante 29 días se jugarán en Doha, además de varios recitales y eventos culturales de un fiesta futbolera en la conservadora sociedad del país musulmán.
A lo largo de un mes, Qatar relajará sus restricciones sobre dónde se pueden adquirir bebidas alcohólicas, incluyendo la cerveza de Budweiser, patrocinador del Mundial, en los ochos estadios y en la zona de la pantalla gigante oficial, situada en el parque de Al Bidda Park.
El presidente de la FIFA Gianni Infantino prometió el lunes que el de Qatar será “el mejor Mundial de la historia, dentro y fuera del campo”. Dijo lo mismo en Moscú hace cuatro años cuando Rusia fue la anfitriona del certamen.
Sin embargo, desde que en 2010 se decidió seleccionar a Rusia y Qatar como futuras sedes del Mundial, 21 de los 24 hombres que formaban parte del comité ejecutivo de la FIFA fueron encontrados culpables por diversas causas penales, exonerados en juicios o implicados en delitos.
El entonces presidente de la FIFA, Joseph Blatter, fue uno de ellos, y sigue vetado del deporte que lideró durante 17 años por varias fechorías. Blatter, sin embargo, asegura que no votó a favor de Qatar.
Se calcula que Qatar recibirá a 1,2 millones de visitantes para el primer Mundial que se juega en medio de la tradicional temporada del fútbol europeo, decisión que se tomó para evitar el abrasador calor del desierto en Medio Oriente.
“Estamos abriéndoles nuestras puertas en Doha sin discriminación”, dijo el emir de Qatar, el jeque Tamim bin Hamad Al Thani, a la Asamblea General de las Naciones Unidos en Nueva York el mes pasado.