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Los Diablos Rojos del México fueron acusados por supuesto robo de señales frente a los Leones de Yucatán.
Andrei Valenzuela León / @andrei_avl
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El pasado domingo, mientras se celebraba el quinto juego de la Serie de Campeonato de la Zona Sur entre los Diablos Rojos del México y los Leones de Yucatán, la Liga Mexicana de Beisbol emitió un comunicado en el que se anunciaban sanciones para el equipo capitalino por haber manipulado las tomas en la transmisión de televisión de los primeros dos juegos de la serie que se llevaron a cabo en la Ciudad de México.
En el comunicado se estableció que los Leones denunciaron que los encuadres de los catchers de uno y otro equipo no eran equitativos, dando a entender que podía existir un caso de robo de señales para dar ventaja a los Diablos. Sin embargo, la LMB determinó que, con base en su investigación, existió una manipulación de las tomas televisivas, pero que no se encontró evidencia de robo de señales por parte de la novena escarlata.
Los Diablos se hicieron acreedores de una sanción económica, además de que su director deportivo, Miguel Ojeda, fuera suspendido de participar en cualquier actividad organizada por la LMB en el plazo un año, y de que las transmisiones de los Diablos serán, a partir de ahora, monitoreadas por personal designado por la LMB para corroborar que se cumplan los reglamentos, pues solo dos equipos en el circuito, Diablos y Toros, cuentan con transmisión propia.
El uso de tecnología y de cámaras para el robo de señales y, en consecuencia, la obtención de una superioridad en el terreno de juego, ha sido un tema recurrente en el beisbol actual, siendo el caso más conocido el de los campeones Astros de Houston en 2017 luego de que se confirmara el uso de estas herramientas para obtener ventaja, teniendo como consecuencias varios despidos, suspensiones y el desprecio generalizado por parte de los aficionados a las Grandes Ligas.
En este sentido, hay que recordar que el robo de señales al equipo rival es una práctica recurrente en cualquier partido de beisbol, por lo que cada novena busca disimular lo mejor posible sus intenciones; no obstante, lo criticable está en el uso de la tecnología para conseguirlo, pues no es lo mismo aprovechar un descuido para descifrar una señal mediante la observación constante, a tener cámaras y personal destinados a este fin.
De esta manera, la situación que ha surgido en el marco de una serie de postemporada que aún no termina y que va a definir en las próximas horas al representante de la Zona Sur en la Serie del Rey 2022, ha generado una polémica que poco ayuda a la visión de una competencia justa, pero que hace pensar en una regulación más estricta en el uso de cámaras y transmisiones televisivas por parte de la Liga Mexicana de Beisbol.
Fotografía: Twitter @DiablosRojosMX
