#InPerfecciones
“No es un instrumento de la ciudadanía para la ciudadanía, sino del poder para agrandar su ego.” -Maikel Ansted
Maikel Ansted Hoffmann / @AnstedM
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En este espacio haré un comentario brevísimo sobre la revocación de mandato, espero no tener problemas, aunque hay que aclarar que NO ESTOY PROMOCIONANDO la revocación, sino dando mi opinión en sentido negativo sobre este supuesto ejercicio.
La revocación de mandato, dice la ley, es el mecanismo de democracia participativa por medio del cual los ciudadanos ejercen su soberanía para revocar o retirar de un cargo de elección popular […] ya sea del poder ejecutivo o poder legislativo federal, mediante el cumplimiento de los requisitos y formalidades establecidos en la presente Ley.
La revocación de mandato tiene incentivos perversos, comenzando porque la ciudadanía NO fue la que incentivó este supuesto ejercicio democrático, sino que fue el mismo presidente quien desde su campaña presidencial lo propuso.
Es un ejercicio demagógico que usualmente lo usan los populistas, dice la Real Academia Española que la demagogia es la “Práctica política consistente en ganarse con halagos el favor popular”, y si observamos detenidamente, es lo que AMLO ha hecho a lo largo de su historia en la política. Básicamente participar en la revocación de mandato (a favor o en contra) es participar en los halagos hacia el populista presidente de México.
Este ejercicio también ha polarizado a la ciudadanía, observemos al movimiento FRENA y a los partidos de la oposición, a pesar de que no estén de acuerdo con la “4T” están divididos y personalmente defiendo a los partidos de la oposición porque hacen las cosas conforme a derecho, cosa contraria de FRENA.
Es interesante la figura de la revocación de mandato porque debilita la tarea de la toma responsable de decisiones del estado, porque desde ahora, cualquier presidente en vez de gobernar, se dedicará a hacer “campaña”, gestionar su demagogia y populismo, crear programas clientelares para ganar la revocación en vez de gobernar como debería.
Finalmente la revocación NO ES UN INSTRUMENTO DE LA CIUDADANÍA PARA LA CIUDADANÍA, SINO DEL PODER PARA AGRANDAR SU EGO, porque tiene el poder de dividir a la población.
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Saludos, un abrazo virtual.
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