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La Fórmula 1 llegó,
pero un carro nuevo se vió,
la Catrina es quien se bajó,
y a Ledesma por supuesto impactó.
Redacción InPerfecto / @InPerfectoMx
redaccion@inperfecto.com.mx
Las dos de la mañana el reloj marcó
y Ángel despierto quedó,
y los juegos en su compu jugó,
pero el horario muy tarde se dió.
Al momento de irse a recostar
Ángel se puso a caminar,
cuando de pronto él se acostó,
pero al piso de pronto cayó.
En lugar de sentir el golpe del suelo,
Ledesma sintió como si fuera en pleno vuelo,
cerró los ojos para no sentir el mareo
pues el viaje astral pasó hasta por un Cancervero.
Llegando al punto del viaje,
una cancha con gente esperando,
una mujer la mano le anda dando
¡era la Muerte que el viaje había planeado!.
Ángel se levantó enseguida,
pensando en que ya su vida se extinguiría,
la Calaca le dijo tranquila,
“Cálmate ya, que tu vida no está de ida”.
“¿Entonces qué hago y en dónde estoy?”
decía Angel a la muerte aún confundido,
veo que hay gente, y es una cancha a la que no he ido,
y me siento inseguro y seguramente un poco vacío.
Esto es fácil Ángel querido,
en el mundo prehispánico el juego preferido.
Ángel volteó a ver a su al rededor,
entendió claramente que el juego de pelota era el ganador.
“¿Quieres qué juegue para salvar mi vida?”
le dijo Ángel que angustiado ya estaría.
“No, quiero que narres este partido,
y que vuelvas al mundo actual diciendo lo que has vivido”.
“La tradiciones deportivas no están excluidas,
de la visión de los hombres que están aún en vida,
pero olvidando sus raíces se encuentran,
pero en tus manos está que vengan de vuelta”.
Ángel no entendía bien de que trataría,
pero pasó un momento con gran gallardía,
al volver a todos les contaría,
la maravilla del deporte que a partir de ese día,
él elegiría.
