Editorial

CÁTEDRA DE CATEGORÍA

 

 

#InPerfecciones

 

La categoría es una de esas virtudes que requieren dignidad y sobre todo mucha inteligencia, y aunque detrás de esa cara de amabilidad Canadá fuera igual de leonino que Trump, México tendrá casa grande y casa chica que mantener.

 

           Carlos Rosas C.   

carlos.rc@inperfecto.com.mx

 

Hacer equipo es una de esas capacidades que no toda la gente ha podido desarrollar a lo largo de la vida, tiene que ver como nos hemos desenvuelto en nuestro entorno y con quienes lo hayamos hecho, es más, hasta podríamos decir que en la forma en que nos amamantaron tiene una repercusión definitiva en como nos integramos a la sociedad.

 

Antes, durante, y tal parece que después de las negociaciones del TLCAN, el señor Donald Trump es uno de esos personajes que efectivamente no puede, no sabe, ni quiere hacer equipo con nadie que no este dispuesto a rendirse ante su nefasta postura negociadora y su nulo respeto por la forma de dirigirse a los demás, pero como dicen “no tiene la culpa el indio”.

 

Que curioso es cuando los eventos coinciden y no queda de otra que aprender a desmenuzar los contenidos ya sea de los discursos o de los actos y la prisa por tener un acuerdo “bilateral” antes de la entrega del último informe de gobierno de EPN es una de esas cosas que huelen raro porque se supone que el acuerdo es entre tres ¿no?.

 

Mr. Donald Trump como lo decíamos en InPerfecciones anteriores tiene la virtud de saber presionar las partes nobles de la cancillería nacional de modo que logra obtener el “si” que está acostumbrado a escuchar, y como en este rollo del TLCAN el señor Trump salió decidido a lograr el acuerdo que más le conviene a los gringos para ir consolidando su plataforma para la reelección, pues, al menos del lado mexicano al Sr. Guajardo ya lo tiene bien agarradito de las bolas pero bien sonriente, por el “gran logro” obtenido.

 

La diferencia es que del otro lado se encontró a una mujer bastante “calzonuda” que parece tener una claridad en la postura y el discurso de una dignidad que ni por asomo se le ve a Guajardo y mucho menos a Videgaray que siempre se la pasaron hablando de “trabajar para lograr el mejor acuerdo” pero nunca dijeron para quien, sin embargo, Chrystia Freelan – Ministra de asuntos exteriores de Canadá- dio cátedra de diplomacia, categoría, y sobre todo dignidad que aunque fuese pura y dura demagogia, el estilo para hacerle frente al histérico de Trump evidentemente lo ha puesto nervioso y lo ha hecho morder el anzuelo para enseñar el cobre y hacerlo despepitar vía twitter –como siempre- que Canadá ha sido “abusivo” durante todo este tiempo además de pasarse de listo con los pobrecitos  y desamparados gringos.

 

¿Qué pasará si Canadá se levanta de la mesa de negociación del TLCAN?, en si la ruptura del tratado trilateral al único que dejará a dos fuegos es al gobierno mexicano que se perfiló como el más urgido en renegociar el acuerdo por la cantidad de compromisos económicos que lo asedian, aunque para ello hayan tenido que doblar las manitas y soportar la humillación de ser portavoz del servilismo internacional.

 

#InPerfecto