Cultura

Las tres fases del Fausto de Goethe, el manifiesto común… y el capitalismo

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“Todo lo vivido en la modernización lleva directamente a la modernidad”

 

 

Luis Ricardo Sandoval / @LuisRSandoval5
luizandcar18@gmail.com  

 

Todo lo vivido en la modernización lleva directamente a la modernidad. Es un ámbito que se transforma  y está expuesto al desarrollo capitalista. Estas vivencias afectan a los seres humanos.

 

Para Marshall Berman, autor de varios ensayos y libros, uno de ellos titulado Todo lo sólido se desvanece en el aire, considera el nombre de su libro como la clave principal para entender al mundo moderno. Se basa en el libro de Marx El manifiesto comunista, que sirvió como base para Berman ese tono que se manifiesta a lo largo de la obra. Incluso, para Berman no le importa mucho un nuevo orden mundial. Ve al manifiesto comunista con la visión, valga la redundancia, de los años 60.

 

La experiencia en el campo del tiempo y del espacio, tanto personal como social. Este tipo de modernismo nos promete aventuras, felicidad infinita, transformarnos en lo que deseam1os ser, tanto interior como exteriormente. Solo que  la amenaza de destruir todo lo que sabemos, conocemos, lo que tenemos y lo que somos, como individuos y como sociedad está latente. 

 

Pero para Berman no hay tiempo límite para que la modernidad acabe. Todo corre en una misma línea que no permite diferenciar la modernidad de la modernización. Se le atribuye al marxismo que sí hay una temporalidad diferencial puesto que son épocas discontinuas entre unos y otros, pero al mismo tiempo, heterogéneos.

 

A su vez, une a toda la humanidad porque aplica a todos y cada uno de nosotros. Nadie está exento de ello. Hay un gran costo humano durante el desarrollo social y económico, solo si también se desarrolla el pensamiento científico. Hace mención que es el tiempo de lo humano, porque el modernismo es en sí una defensa contra la modernización.

 

Nacen las vanguardias para tratar de contrarrestar a la modernidad. Existen un par de paradojas, porque para que exista el desarrollo, primero tiene que haber un sacrificio, al mismo tiempo que dentro de la unión que nos promete el modernismo, es para desunirnos. La tradición es inexistente, mientras que los post-modernos, trabajan juntos pero olvidando la historia. Ellos se enfocan en el ahora y en el mañana. Se confía en la ciencia y en la tecnología, el individualismo y la especialización son su base. Hay una idea de progreso. Mientras tanto, el capitalismo ve una oportunidad en la modernidad

 

En el caso del Fausto de Goethe, el personaje representa al individuo inconforme con todo, hasta su propio ser, por ese motivo es que quiere quitarse la vida. Él desea el desarrollo personal y social, aunque critique al modernismo, termina siendo parte del movimiento.

 

Habrá algunos sacrificios humanos pero es el costo para que el desarrollo exista. Incluso, la charla entre Dios y Mefistófeles, se representa en que tiene un significado mayor: es el deseo personal contra el raciocinio.

 

Además, es la tragedia del desarrollo. Hay un autodesarrollo personal al mismo tiempo que un desarrollo social económicamente viable. Todo en la sociedad, hablando de lo intelectual, lo moral, lo social y lo económico deben estar unidos, aunque eso lleve a resultados opuestos a los deseados. La tragedia de Fausto viene cuando él pierde el control de su mente, quienes viven de manera independiente al héroe.

 

Berman dividió la obra de Fausto en tres transformaciones: el Soñador, el Amante y el Desarrollista. En la primera, como Soñador, es la división social laboral, la riqueza, el potencial latente de que la sociedad luche por lo que desea. 

 

La segunda, como Amante,  es el choque de mundos distintos, de ideas entre Fausto y Mefistófeles, que representan al capitalismo contra Margarita, quien representa lo tradicional. Y el tercero, como Desarrollista, se demuestra que los impulsos para llevar a cabo las cosas deseadas, junto con algo de apoyo económico, es lo que mueve al mundo. Berman, en este sentido, considera que la paradoja de destrucción y reconstrucción, puede transformar la vida de Fausto. 

 

En este punto, refleja al capitalismo en su máxima expresión: controla  a sus obreros, pone su energía en trabajar, porque el descanso es una especie de pérdida de tiempo, el dinero o el capital es lo más importante, aunque su pensamiento haya sido puro para Fausto, el resultado es completamente la destrucción de su persona.

 

¡Hasta la próxima!

 

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