Editorial

Salem: una historia llena de ignorancia.

#InPerfecciones
La caza de brujas dio inició de una de las maneras más tristes y tontas que se nos puedan ocurrir actualmente.

 

 

Georgina Valez / @gini_friski
gvt3377@outlook.es

Hace muchos años, para ser exacta, en 1692 comenzaron a ocurrir una serie de sucesos extraños a un par de personas de la comunidad de Salem, en Massachusetts, de la nada, sufrieron de algunas convulsiones, visiones y sentían piquetes por todo el cuerpo, al desconocer el origen de estos síntomas lo más lógico que se les ocurrió en esos tiempos tan conservadores y religiosos, por más increíble que parezca, es que eran producto de brujería. La primera persona en ser señalada fue la esclava del reverendo del lugar, ya que a ella le encantaba contar historias misteriosas y practicar vudú, ya se corrían los rumores de que se veían a niñas y mujeres haciendo rituales de noche en el bosque, y como el pueblo era muy religioso, todo esto claramente no era obra de dios y se lo atribuían a satanás. La esclava, llamada Tituba estuvo presa tras estas acusaciones, de las cuales por cierto tuvo que declararse culpable para evitar la tortura e incluso la condena de muerte, a ella se sumaron cada vez más mujeres que eran acusadas de brujería sin fundamentos, más bien lo que tenía el pueblo era miedo, pues la mayoría de las consideradas “Brujas de Salem” eran más bien curanderas, parteras, y lo que podrían ser doctoras y científicas de aquel entonces. Claro que tenían mucho más conocimiento que la mayoría de los habitantes, y como el temor a lo desconocido es natural para el ser humano fueron los blancos perfectos para responsabilizarlas de tales hechos, porque cada vez aparecían más personas con comportamientos extraños, lo que nadie supo, fue que eran provocados por un pan de centeno en mal estado, al ingerirlo, tenía hongo con un alcaloide llamado ergotamina, del que deriva el LSD y puede explicar claramente porqué llegaban hasta el punto de tener visiones, esta es al menos la hipótesis más fuerte que se tiene hasta el momento, y de no ser por la ignorancia de ese entonces se hubiera salvado la vida de alrededor de 20 personas, y la libertad de al menos otras 200 que eran acusadas de practicar la brujería. 

Me encantaría decir que esto es cosa del pasado, pero lamentablemente se sigue acusando de brujería sin fundamentos, se sigue odiando a los gatos negros por creer que son de mala suerte y se siguen matando lechuzas por creer que son brujas, es como insultar nuestra inteligencia, por honor a ella que pronto caduquen creencias tan tontas como estas, por honor a ella y a las Brujas de Salem.

 

#InPerfecto