#Sexualidad
“Para evitar alergias que pueden afectar nuestro rostro es importante seguir un protocolo de higiene y cuidado en nuestros cosméticos”
Ana Slhimovitch Maquilladora profesional / @anaslhimovitch
ana.slhimovitch@inperfecto.com.mx
Tal vez te hayas encontrado con un problema que es más común de lo que creemos: el maquillaje ha causado una reacción alérgica. La causa, una de las más frecuentes, está en que tal vez probabas algún cosmético o por falta de cuidado que debías en la conservación de tus productos de maquillaje. Entre los más afectados está nuestros ojos, casi siempre los que más sufren los efectos del maquillaje, sobre todo si no se cumplen unas medidas de seguridad e higiene fundamentales.
A continuación, te presento una lista de cuidados que te ayudaran a proteger tu piel de mejor manera:
Limpieza: Es importante que tanto los envases de los cosméticos que utilicemos como la bolsa donde los guardemos estén siempre limpios. De esta forma, evitamos la contaminación con bacterias que pueden provocar una infección en los ojos. Lávate siempre las manos antes de aplicarte el maquillaje y cierra bien los envases cuando termines de usarlos. Puedes usar alcohol isopropílico para desinfectarlos.
Elige maquillaje de calidad: evita aquellos productos que tengan componentes químicos y materiales “pesados” como zinc, aluminio, disolventes o tintes industriales, etc, o de dudosa procedencia. Si tienes los ojos sensibles busca productos elaborados a base de extractos naturales.
No humedezcas los productos: si ves que se han quedado resecos, no utilices agua y mucho menos saliva para humedecer los cosméticos de los ojos, podrías contaminarlos con bacterias. Utiliza un productos especializados para reactivarlos, como el duraline de Inglot.
Tus cosméticos ¡son tuyos! Nos explicamos: a veces, prestas según qué cosmético a alguna amiga. Has de tener en cuenta que, por razones de higiene, los cosméticos, especialmente los de los ojos, no deben compartirse. Si vas a probar una muestra en alguna tienda, hazlo siempre con un aplicador desechable y pruébalo siempre sobre la piel de la mano antes de aplicarlo en el ojo.
Si te causa irritación, ¡sácalo del neceser!: si algún producto te provoca alergia o te causa molestias en el ojo, se enrojece o te causa escozor, deséchalo sin pensarlo. Consulta con el especialista si la irritación del ojo persiste.
El maquillaje de ojos caduca, aunque no lo parezca, el maquillaje también caduca. Elimina el bote del rímel después de unos meses o si ya está seco y grumoso.
Cuidado con la temperatura: No dejes los cosméticos en ningún sitio donde puedan estar expuestos al exceso de calor o frío, eso puede alterar su fórmula y la efectividad de los conservantes que contienen.
Si tienes una infección en los ojos, no te maquilles: Además, deberás deshacerte de todos los productos que estabas usando cuando comenzó la infección para no volver a infectarte.
Aplícalo correctamente: muchas personas utilizan el lápiz de ojos por dentro de las pestañas. Esta forma de delinear no es aconsejable si tienes el ojo sensible, ya que, al entrar el producto en contacto directo con el ojo, puede propiciar la irritación de los mismos o la aparición de conjuntivitis y alergias.
Si usas lentes de contacto: Los problemas que puede traer el maquillaje a la visión incrementan en las mujeres que usan lentillas, ya que el maquillaje favorece las infecciones de esta misma. Estas molestias abarcan desde la intolerancia a la lentilla hasta favorecer infecciones, que en los portadores de lentillas pueden llegar a ser más graves.
Desmaquillarse: Irnos a la cama sin rastro de maquillaje en los ojos es fundamental, pero algunos productos desmaquillantes también pueden lastimar la piel de los parpados y afectar el lagrimeo de los ojos. Para evitarlo, debemos leer con detenimiento la composición, evitando aquellos que contengan alcoholes u otros componentes agresivos para la piel.
Y siempre ante cualquier irritación o molestia consulta con un oftalmólogo para su exploración y tratamiento.