#InPerfecciones
Si a Zapata le gustaban los hombres, era asunto suyo. Nadie lo sabe.
Zapata hizo lo que pudo y a nadie le importaba su orientación.
Armando De La Torre García / @Armando_dltg_21
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Emiliano Zapata (Morelos 1879-Morelos 1919) un personaje clave en la Revolución Mexicana, co-creador de El Plan de Ayala con Otilio Montaño, defensor de La Reforma Agraria y dirigente del Ejército de Libración del Sur.
Zapata fue objeto de una ilustración de Fabián Cháirez, titulada: “La Revolución”. Esta obra desato una serie de preguntas, de disgustos y manifestaciones violentas.
La familia de Zapata permitió que la obra siga en exhibición. Pero ¿Realmente es arte?, el artista pinto su forma de percibir al revolucionario y no debe tener gran impacto en el concepto artístico. La exposición EMILIANO ZAPATA DESPUÉS DE ZAPTA, presentada en Bellas Artes muestra una serie de trabajos y obras sobre el caudillo, “La Revolución” es solo una pequeña ilustración a la cual no se le debe dar gran relevancia. Nadie niega que sea una nueva forma de percibirlo, pero la exaltación y el disgusto es enorme, y el engrandecimiento como trabajo artístico es casi nada.
En México se vivió una actitud homofóbica muy grande y eso representa lo poco inclusivo que somos. La pintura tiene el apoyo de la comunidad LGTBQ+ y de muchas otras personas las cuales supieron aceptar la percepción del autor.
Un Emiliano Zapata en tacones y sobre un caballo con el pene erecto, no nos puede dar nada, está bien porque es algo subjetivo, pero el desprecio y la agresión son totalmente brutales.
La educación artística en México es casi inexistente y lo podemos ver en las revueltas que se dieron fuero del Palacio de Bellas Artes.
Zapata fue importante por lo que hizo y por lo que lucho, no por su orientación sexual.
