#InPerfecciones
Una historia que me dejaron escribir en la escuela, no es una historia común es lo interesante.
Camila Rodríguez Falcón
camila.rdz.falcon@in
Soy la voz de mis historias
En 1516 en la Navarra, el fuerte olor a tinta negra arrasaba con el olfato de la multitud, hipnotizados al ver y escuchar la perforación de las pieles con la aguja de la máquina de un tatuador nervioso al percibir tantas miradas fijas en su rostro y en la piel marcada por un tatuaje, en el viejo sillón de cuero desgastado se observaba Mish, tocando su piel arrugada y marchita por los años, se le notaba ansiosa, la mayoría de las personas situadas en la taberna miraban con extrañeza a Mish ¿Qué hará una vieja aquí? Se preguntaban al ver sus arrugas, los demás gritaban con entusiasmo después de tomar derramar sobre sus pieles blancas vino tinto, se aventaban botellas de licores ya viejos, más viejos que Mis. El tatuador grito fuertemente.
