#Sexualidad
Después de deleitarnos del suave susurro y suspiros de Judith Antuna plasmados en hojas con letras de libertad, seguimos descubriendo la poesía erótica en otras voces, en otras letras.
El delicado arte de escribir a una mujer frases de amor en una mezcla de pasión y deseo, en un toque sutil con la sensibilidad de un caballero,
Rosario Aguilar.
rosario.aguilar@inperfecto.com.mx
Desde la isla de la Palma, en el municipio Villa de Mazo, habita Ricardo Martín Lemes donde tuvo feliz infancia en la unidad de su familia en la isla de Canarias Lanzerote, de siempre acompañado de libros, sin importar el lugar, circunstancias cada libro rescataba sus sueños y no solo lo atrapó la lectura, también se convirtió en amante de la naturaleza, así nació su profesión, la jardinería, el paisajismo y la ecoagricultura fueron por muchos años su pasión, tanto que dio clases de jardinería y paisajismo a desempleados, y cursos de ecoagricultura en centros escolares así como formación del profesorado en agricultura ecológica, ahora dedica su tiempo como Ricardo lo define “exclusivamente a susurrar letras”.
El periodista de Virginia USA, Carlos E. Orbezo escribió sobre él “ Muchos deben plantearse la pregunta se si el autor busca excitar el deseo sexual, mediante el juego de palabras y figuras eróticas muy bien escritas. Diría que este escritor sabe desarrollar este género literario y logra el objetivo de mostrar redacciones del real “amor sensual”. Lo defino como un maestro de versos cargados de atracción intensa”.
Ricardo Martín nos dice, “un poema es un universo, un mundo, una obra maestra y como tal necesita tiempo, espacio, fondo, forma, ritmo, musicalidad, metáforas, sueños…
Mis estudios y mi trabajo nada tienen que ver con el mundo de las letras, pero eso nunca me impedido
descubrir, sentir y amar tanto a la poesía.
Siempre he necesitado estar vinculado profundamente a ella y escribir poemas como terapia para éste mundo de locos.
Pero leamos lo que tiene para nosotras,
“Lo sabía”
1> Parte:
Había decidido irme,
Ya no aguantaba el estrés hallada en la isla que me vio nacer,
Cogí mi vieja maleta,
La que fue de mi padre cuando emigró a las Américas,
Una maleta echa de tablas de madera vieja y cuatro tachas rumbientas,
Metí dentro mis sueños y embarque en un velero,
Surcando mares he islas hasta llegar a la más verde y bella,
Desembarque con mi vieja maleta llena de sueños,
Sin temores recorrí calles empinadas y al sentarme en una terraza la conocí a ella,
Ojos verdes como la olivina,
Dulce y angelical rostro,
Sonrisa de beso,
Yo solo la escuchaba embobado mientras mis embelesados ojos la miraban,
Fue tan dulce,
Nos despedimos con un beso en la mejilla y un…
Buesalgnos vemos…
Esa noche apenas pude dormir…
No podía quitármela de la cabeza,
Sólo de pensar en ella me excitaba,
Mi pecho se agitaba,
Mis manos jugueteaban con mi erecta hombría hasta que llegaron las primeras lluvias,
Y las segundas,
A la mañana siguiente fui por la misma terraza donde la había conocido y allí estaba,
Sonriente,
Desesperada por verme… me dijo cuando sus labios pudieron despegarse de mi boca,
Me cogió de la mano y con ojos acaramelados me dijo ven…
Fuimos a su casa,
Estaba cerca…
2>Parte:
Al entrar a su casa,
Ya nuestros labios se comían locamente,
La lleve hasta el borde del sofá en brazos,
le arranqué la blusa y mis labios recorrieron sus senos enloquecidos de placer,
Mis dedos resbalaron como agua tibia hasta su ombligo y la minúscula tanguita que llevaba puesta rodó por tus temblorosas piernas,
Me dejé caer sobre ella,
Cogí sus piernas y las levanté con mucha delicadeza y empecé a comer de sus labios vaginales completamente empapados de gloria,
Abiertos!!,
Deseosos de ser devorados por mi juguetona lengua,
Y con solo un suspiro desde sus labios la hice venir,
Seguí y seguí comiéndoselo muy despacio,
Yo deseaba más y más de su sagrado néctar amatorio,
Ella deseaba que siguiera,
Y yo quería darle más y más placer,
Ella sintió como se venía otra vez!!
Pero esta vez fue más brutal el placer recibido por la forma que se lo estaba haciendo,
Tuvo hasta dolor de tanto placer, pues sus manos no dejaban de clavar sus uñas en mi espalda.
Dios!!!
Ella pensó que se iba a morir…
Yo no paraba de lamer su hinchado clítoris,
Ella notaba que iba a explotar,
Estaba súper hinchado,
Muy duro cada vez más y más rojo,
Muy sensible a mi alocada y lujuriosa lengua,
Yo seguí y seguí lamiendo el manjar de su fruta,
Llenándome cada vez más la boca de su jugo,
…No pudo más,
Ella gritó…,
Grito como nunca antes había gritado,
Ese gemido desgarrador fue el inicio de varios orgasmos seguidos,
Gritaba y se movía sin control,
Perdió varias veces casi la conciencia,
Estaba en su mundo,
No sabía si era fantasía o realidad,
Poco a poco le hice volver a la realidad,
Dejando que se recuperase,
La dejé boca a bajo,
Besé muy acarameladamente su espalda,
Le acaricié todo tu cuerpo tembloroso,
Me coloque encima de ella y la empecé a penetrarla despacio,
Muy despacio,
Sabía que lo tenía muy sensible,
Se acababa de venir varias veces seguidas,
Hasta casi sentirse morir…
Poco a poco,
Comprobé como su cuerpo iba respondiendo a mis penetraciones,
Note como de nuevo se iba humedeciendo,
Como volvía a aparecer ese deseo,
Noté como su cuerpo quería más,
La penetré más y más fuerte,
Se lo hice más intenso,
Como ella me lo empezó a pedir,
La sentía toda dentro de ella,
Como entraba y salía,
Cada vez más salvaje,
Más fuerte,
Cogiéndola de su cabello y tirando hacia mí a la vez que me la empotraba salvajemente,
Penetrándola más fuerte aún,
Ella sintió como me iba a venir dentro de ella,
Y apretando su sexo contra mi pene como con miedo de perderme,
La sentía más dentro aún,
Me enloqueció esa sensación,
Dios mío!!!!
Ahhh…
Que placer…
Seguí moviéndome,
Descargando en tu interior todo ese deseo acumulado,
Diossss que placer…
Me tumbé junto a su espalda me puse entre sus brazos y su agitada boca,
Y le susurré al oído…
“SABÍA QUE TE ENCONTRARÍA”
Sin duda letras que se encienden y que ruborizan y hoy solo suspira y descansa que aún queda mucho por leer.
#InPerfecto