1968

2  de octubre ¡no se olvida!

1968, EN LA MEMORIA DE MÉXICO

La juventud ya no quiere acallar su voz, la represión vivida llega ya a un estado donde la única forma de hacer valer sus derechos es organizar las ideas,  plantear sus propuestas y unificar sus fuerzas.

 

Rosario Aguilar.

rosario.aguilar@inperfecto.com.mx

 

Reconstruir la historia con pedazos de sueños, con futuros truncados, con la rabia de ser sometidos por el poder, el llanto de tus amigos, hermanos caídos, con las balas incrustadas en el cuerpo, con el ser tratados como delincuentes, reconstruir la historia de miles de jóvenes, que sólo querían estudiar, salir a sus tardeadas, conocer a la chica o chico, poder abrazar y robarle un beso, soñar con la graduación y forjar un futuro próspero.

 

Llorar a los muertos, llorar a los desaparecidos, llorar a los vivos ya que su historia de vida cambió inesperadamente, pesadillas, fichados como delincuentes, sin oportunidades de limpiar sus nombres, sus ideales pisoteados, un gobierno en el que no se podía ya creer, (si en algún momento se pudo creer).

 

Cada joven ahí reunido, fue una historia y muchas de esas historias se apagaron de la forma más cobarde, no fue un regaño o una invitación al diálogo, fueron mutilados en sus ideas, sus cuerpos, su lucha por una vida libre y una sexualidad orientada intentaba tomar fuerza, pero cambiaron sus paseos, el cine, sus diversas formas  de diversión, la música que se escuchaba, y que en este año el rock deja plasmado su paso en la música bandas como Led Zeppelin, Black Sabbath, Deep Purple, Pink Floyd, en inglés, en español Los hermanos Carrión, los Rogers, los locos del Ritmo, los Hooligans tenían ese estilo rebelde y divertido para los jóvenes.

 

 

La moda fue también del interés juvenil, una onda ya ni tan conservadora,  más llamativa, las minifaldas eran portadas con orgullo de enseñar un poco más, colores vivos, estampados, botas largas,  melenas largas en señal de libertad y protesta.

 

Bien pudieron dejar todo y unirse a las olimpiadas México 68, bien pudieron involucrarse en otros movimientos,  pero ya no era posible callar sus voces, ya fue imposible decirles que no podían pensar y ser autónomos, ser independientes, ser libres.

 

Hemos visto cómo la sexualidad fue buscando su causa, empoderarse en la vida cotidiana de cada individuo, de ser ya llama por su nombre y que no se limitará a aprender de manera empírica,  ¡ya basta!, ya basta de seguir callando, ocultando, ya no se podía seguir siendo sumisos ante las ideas de quien tenía el poder, ya no se podía seguir reprimido las almas de multitudes que solo querían vivir.

 

Llegamos al 2 de Octubre de 1968 y con ello llegamos a la matanza  de Tlatelolco, donde reconstruir la historia ha tenido que ser juntando pedazos de corazones adoloridos, de almas  traicionadas por quienes juraron defenderlos, de familias separadas por la sangre y el olvido, la indiferencia de un gobierno que solo mostró la cara vil de sus deseos oscurecidos por un enfermizo poder.

 

 

Hoy decimos el 2 de octubre no se olvida por que aun faltan pedazos para reconstruir  la historia que aún nos falta.

 

#InPerfecto