#Editorial
Carlos Rosas C.
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El tema de moda, o el famoso “treding topic” con el que arrancamos la semana es la escaramuza que se ha vuelto el retuiteo del periodista Ricardo Alemán que muy creativo le dirigió a los que tiene a bien llamar “chairos” sobre las coincidencias que han tenido los asesinatos de algunos personajes de la farándula a manos de sus fans, cosa que el señor Alemán puso sobre la mesa y desatando un vendaval en redes sociales que lo llevaron a ser despedido de Televisa y Canal Once por aquello de que el compromiso en contra de la incitación a la violencia es parte del proceder de las televisoras y otros señalamientos que desembocaron en el despido del periodista.
Ricardo Alemán se ha caracterizado por ser un columnista bastante recalcitrante que gusta de la provocación y ha encontrado en la figura de Andrés Manuel López Obrador una válvula de escape para dar rienda suelta a toda una larga lista de adjetivos peyorativos para el ahora candidato de Juntos Haremos Historia y el partido político Morena situación que lo ha hecho sobresalir por tildes de “chayotero”, “mensajero del gobierno”, priista, etc.… aspecto que parece gustarle porque le entra duro al escarceo en redes sociales y que ahora lo ha dejado al menos en dos de sus intervenciones en televisión en estado de desempleo.
El periodista ante la situación señala en un video donde hace uso de su derecho de réplica para exponer que ha sido victima de un linchamiento en las redes gracias a que todo el mundo se le fue a la yugular y torcieron las palabras que el ni siquiera habría proferido donde se sugiere el magnicidio y que en definitiva fue un error de su parte el haber tomado inocentemente aquel “meme” para aludir a quienes trae entre ceja y ceja. Tal parece que al señor Alemán le dio un ataque de amnesia selectiva cuando replica que ha sido victima de gente mal intencionada que lo quiso y logró perjudicar.
Y es que no podemos olvidar que en los tiempos donde la opinión que corre por las redes sociales resulta tener toda clase de repercusiones que se desprenden de interpretaciones donde lo que es políticamente correcto comienza a carecer de cualquier análisis lógico y si bien es cierto que exponer la opinión personal debe ser un acto de responsabilidad pos al periodista Ricardo Alemán se le ha regado el tepache por el tono provocador y lo que han llamado hacer “apología del delito”, ya que aparentemente el discurso de la tolerancia precisamente es el menos tolerante y se engancha de inmediato generando un clima muy agreste donde literalmente llueven pedradas.
La naturaleza que ha adquirido la carrera electoral ha tenido precisamente la característica de ser violenta y que se ha venido a sumar con la violencia que prevalece en todo el país y de la cual se da cuenta en todos los noticieros de manera cotidiana y que ha hecho a las audiencias un tanto insensibles pero que también ha confrontado a quienes señalan que este clima de shock ha sido provocado por el abandono del gobierno a los programas de seguridad.
Es realmente una lástima tener que ver estas expresiones nefastas que generan polaridad en las opiniones que se difunden de manera indiscriminada pero es peor la actitud de engancharse en discusiones estériles que solo malgastan el tiempo de quienes participan en ellas y de quienes quedan como testigos de distractores mediáticos que a la larga no construyen nada y ni siquiera son ejemplo de la tan mentada democracia en la que vivimos.
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